Después de que Roy Barreras, presidente del Senado, asegurara que las colectividades que no se declaren de gobierno no podrán tener representación en las presidencias de las comisiones y menos de las plenarias, ayer se conoció una carta del excandidato Sergio Fajardo donde asegura que con la inauguración del nuevo Congreso se acaba la luna de miel y empieza en firme la era Petro.
Barreras ha dicho en varias oportunidades que “como es obvio, en las democracias del mundo los partidos de gobierno gobiernan y las bancadas de gobierno dirigen los debates y, por lo tanto, van a las presidencias. Ni los partidos de oposición, ni los partidos independientes presiden las comisiones, solo los partidos de gobierno, sobre todo cuando son casi todos y todos tendrán la posibilidad de ser los gestores del cambio”, indicó.
"Los partidos que perdieron las elecciones presidenciales tienen hoy dos mensajes muy bellos: primero, permiten que le hablemos a las 'dos colombias', la que ganó con nosotros, con Petro y Francia y que tiene el mandato popular del cambio, que son las reformas. Y la Colombia que votó con el ingeniero Rodolfo (Hernández), que tenía temores y ahora ve que hay un acuerdo nacional y que el Gobierno es para todos”, añadió.
“Ese acuerdo nacional se ha visto reflejado en la coalición mayoritaria, la más grande que ha tenido algún presidente, los partidos de gobierno tienen otra condición que será histórica”, remarcó Barreras.
En contraste, el exgobernador de Antioquia, Sergio Fajardo, escribió en un comunicado publicado ayer que “el dueño del escenario es hoy Roy Barreras, destacado practicante del todo vale en política, sutilmente reciclado como expresión del cambio. Con su habilidad singular dejó tirados en la lona a los representantes de la izquierda, a quienes les va a tocar humildemente ver cómo Barreras le pone la banda presidencial a su líder máximo".
Igualmente, critica cómo los líderes de otros partidos tradicionales han sido seducidos por Barreras y han visitado al presidente electo para rendirle pleitesía. “Se postraron a los pies de quien era su principal enemigo y le van a apoyar las reformas que jamás habían apoyado. La foto de César Gaviria abrazado con el presidente electo es la cereza del pastel de la ignominia. Ver para creer: aprobarán las reformas tributaria y agraria y, como si fuera poco, una reforma política que en palabras de Barreras ¡va a acabar con el sistema clientelas corrupto!”.
"¿Y, cómo lo hizo? No se sabe, ni se sabrá por el momento. Está más claro que nunca que la mayoría de los partidos políticos no tienen ideas, ni propuestas; con notables excepciones, están integrados por vividores del Estado, negociantes en cada elección, vendidos al mejor postor. Tienen precio y por tanto más adelante vendrá la infaltable cuenta de cobro", finalizó Fajardo.