Guerra en Ucrania le quita popularidad a Angela Merkel | El Nuevo Siglo
AFP
Domingo, 4 de Diciembre de 2022
Agence France Presse

La popularidad de Angela Merkel estaba en su apogeo cuando hace un año dejó la jefatura del gobierno alemán tras permanecer 16 en el cargo. Pero su imagen sufrió una rápida erosión por la guerra en Ucrania y su presunta permisividad con la Rusia de Vladimir Putin.

Desde que dejó la cancillería, el 8 de diciembre de 2021, Merkel, de 68 años, vive alejada de los focos. La que fue considerada durante mucho tiempo como la mujer más poderosa del mundo trabaja ahora en sus memorias y disfruta de alguna que otra serie de televisión.

Cuando estaba al mando de la mayor economía europea, gozaba de un amplio apoyo y era conocida por ser una firme defensora de los valores liberales occidentales.

La ofensiva en Ucrania, lanzada el 24 de febrero por el presidente ruso, resquebrajó su aura y solo un 23 % de los alemanes desea ahora que regrese al poder, según una encuesta del instituto Civey de finales de noviembre.

"Un año después, el mundo está en llamas, Rusia invadió Ucrania, los precios del gas y la gasolina están por las nubes y Alemania teme el invierno", explica un viejo confidente de Merkel, el periodista Alexander Osang, de la revista Der Spiegel. 

"Angela Merkel pasó de modelo a culpable, de gestora de crisis a causante de crisis", añade.

La embajada rusa está situada cerca de las oficinas concedidas a la excanciller. Desde el inicio de la invasión de Ucrania, los berlineses dejan regularmente pancartas y flores a las puertas de la misión diplomática.

La primera mujer en llegar a la cumbre del poder en Alemania ha sido acusada, en este nuevo contexto, de haber sido complaciente con el presidente ruso y de haber profundizado la dependencia del país de los hidrocarburos de Moscú.



Una de las decisiones que se le reprocha es haber respaldado el proyecto de gasoducto Nord Stream 2, incluso después de la anexión rusa de la península ucraniana de Crimea en 2014.

Ante las críticas, Merkel rompió su silencio y tuvo que justificarse en varias entrevistas con periodistas de confianza.

Para Hedwig Richter, profesora de historia moderna en la Universidad Bundeswehr de Múnich, la pérdida de prestigio de Merkel ha sido "excepcional" y encarna los errores de evaluación política de toda una generación.

Los gobiernos encabezados por Merkel "pensaron que era realista colocar valores como los derechos humanos y la protección del clima a la zaga. Pero ahora la realidad les devuelve el golpe", analiza.