Mientras llegan más críticas a la reforma a la salud, esta vez desde la Iglesia y desde un grupo de ex altos funcionarios, el Gobierno confirmó que sí se presentará el proyecto durante las sesiones extras que se iniciaron ayer en el Congreso de la República.

A pesar de que el Gobierno no priorizó la reforma a la salud dentro del decreto que estipulaba el comienzo de las sesiones extraordinarias, ayer desde muy temprano tanto la ministra de Salud como el de Interior aclararon, desde diversos escenarios, que la razón por la que no se ha presentado el articulado ante el Congreso de la República es porque no está listo.

La ministra Carolina Corcho afirmó que “nosotros esperamos radicar esta reforma lo más pronto posible, la razón por la que no se le ha presentado al país es justamente, que si la presentamos incompleta van a decir que es improvisación y que va a generar mayor incertidumbre. Entonces nosotros consideramos lo más prudente, ya con el documento completo, cuando ya esté, hacer la presentación en la radicación del proyecto de ley”.

En el mismo sentido se expresó el ministro del Interior, Alfonso Prada: “Estamos en la redacción final del articulado, estamos mirando hasta el último detalle, todo el régimen de transición que, tal vez, es el más complejo. Sí va el proyecto a sesiones extras".

Indicó que entre esta semana y la próxima se podría presentar la iniciativa, para que sea discutida en el Congreso.

Socialización del proyecto

La jefe de la cartera de Salud se ha reunido en los últimos días con diferentes organizaciones y comunidades para divulgar la esencia del proyecto.

Recientemente tuvo un encuentro con los gobernadores del país, donde la ministra amplió su disertación al hablar de los determinantes sociales de la salud, la atención preventiva oportuna y el objetivo de nivelar la prestación de servicios en todo el territorio, garantizando acceso y atención médica en condiciones de equidad, respeto y defensa de la vida.

Antes de abandonar el recinto la ministra Carolina Corcho anunció que el proyecto de ley de reforma a la salud será radicado está semana ante el Congreso de la República.

Por su parte, el Gobierno nacional se reunió con directivos de la Nueva EPS y la misión de la Organización Mundial de la Salud, dentro de la concertación prevista con distintos sectores sobre la reforma a la salud.

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Por parte de la Nueva EPS participaron los miembros de la Junta Directiva de la entidad: Néstor Ricardo Rodríguez (presidente), Enrique Vargas Lleras, Noemí Sanín Posada, Fernando Jiménez Rodríguez y Beatriz Emilia Muñoz Calderón.

Al mismo tiempo, el jefe de Estado estuvo con la misión de alto nivel de la OMS/OPS, integrada por nueve personas, con el fin de brindar cooperación técnica a la propuesta de reforma al sector.

Derecho de petición para que se conozca la reforma

Un grupo de altos exfuncionarios como Fernando Ruiz, Augusto Galán, Jaime Arias, Carlos Castro, Diana Cárdenas, María Andrea Godoy y Beatriz Londoño presentaron un derecho de petición con el objetivo de conocer las medidas que el Gobierno implementará para cambiar el sistema de salud.

“El grupo quiere entender y está atento al proyecto de ley de reforma al sistema que ha planteado el Gobierno nacional. Estamos también pendientes de los escenarios hipotéticos que puedan resultar de esa propuesta”, señalaron a los medios.

“El Gobierno tiene la obligación de presentar ya el articulado y de darle el debate más amplio posible. El sistema de salud tiene que estar perfeccionándose: hay temas como la salud rural, hay temas como pago a los trabajadores de la salud y condiciones salariales”, dijo el ministro de Salud del Gobierno de Iván Duque, Fernando Ruiz.

“Queremos propiciar un debate técnico participativo, que estimule un sólido consenso sobre lo que es deseable y lo que es posible a partir del mandato institucional, y de los importantes logros que hemos tenido desde reforma de 1993. No existe pertenencia a ninguna organización”, aclaró Galán Sarmiento.

Igualmente, en el documento se plantearon 15 preguntas generales que abordan cinco aspectos: participación en el proceso de consideración, deliberación y aprobación de la reforma; cumplimiento de mínimos constitucionales de la política pública en la cual se enmarca la reforma estructural propuesta; razonabilidad, proporcionalidad y progresividad de las medidas propuestas; el régimen de transición y la sostenibilidad de la reforma.

También se cuestiona si el Gobierno propondrá dentro de la reforma al sistema de salud la modificación de normas de carácter estatutario. Y hay un apartado que se refiere a los avances y logros del sistema de salud que se van a mantener o que se van a afectar con la reforma.

De igual manera, se cuestionó el costo de la reforma a la salud que se propone y si este se podrá asumir de la forma y en los tiempos que se establece y de manera sostenible.

“No solo estamos preocupados por ese futuro lejano del sistema, sino por el futuro inmediato que tiene que ver con la transición. ¿Cuáles son los mecanismos y herramientas que están previstas en el proyecto que garanticen que esa transición no sea traumática, no cueste vidas ni sufrimiento?, preguntó Galán.

Entre otros cuestionamientos que se hicieron están: ¿cuál sería el papel de la Adres, el llamado banco de la salud? ¿Se encargará de hacer pagos directos? ¿Tiene actualmente esa institución la capacidad para hacer esa transacción?

La posición de la Iglesia

En su reunión anual, la Conferencia Episcopal se pronunció sobre la reforma a la salud que adelanta el gobierno del presidente Gustavo Petro y le pidió que esta convoque la "unidad y no la división", solicitando además que tenga en cuenta la dignidad humana. 

El padre Raúl Ortiz, director del departamento de doctrina de la Conferencia Episcopal, aseguró que desde la Iglesia Católica reconocen que el sistema tiene fallas y es necesario buscar mejores alternativas; sin embargo, precisa que no hay que desconocer los avances de los anteriores gobiernos. 

En la conferencia, el clero manifestó que actualmente no se puede iniciar la discusión de la reforma pues, como se sabe, aún no se conoce el documento oficial. 

"Puesto que no se conoce propiamente el proyecto, no podemos llegar a conclusiones precipitadas. Lo único que podemos decir es que existe la doctrina social de la Iglesia, que tiene ciertos principios en los que esperamos que se base la reforma al sistema de salud. Es decir, concentrarnos en la dignidad de la persona, que el bien común es corresponsabilidad de todos (que hoy ya hemos aplicado en que exista un régimen subsidiado y uno contributivo) y que el Estado nos represente a todos de manera vinculante", señaló Ortiz.

Por su parte, monseñor Germán Medina, obispo auxiliar de Bogotá, invitó a un diálogo nacional, en el que el texto definitivo contenga los aportes de distintos sectores. 

"La participación es muy importante, que las propuestas se den a conocer, que se puedan difundir, debatir y enriquecer, porque hoy no conocemos el texto, el articulado. Es un llamado a no imponer, sino a abrir la posibilidad del debate y el diálogo".