A relación | El Nuevo Siglo
Miércoles, 5 de Noviembre de 2014

El Congreso se alista para ‘meterle diente’ a las circunstancias que llevaron a la tragedia de los mineros en Amagá (Antioquia). Se citará al ministro de Minas y Energía, Tomás González; la viceministra de Minas, María Isabel Ulloa; el viceministro de relaciones laborales del Ministerio de Trabajo, Enrique Borda; la presidenta de la Agencia Nacional de Minería, Natalia Gutiérrez; y el director de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, Carlos Iván Márquez. La idea es que informen al Legislativo qué se está haciendo para evitar que en otras minas no sólo de esta zona antioqueña sino de todo el país se presenten tragedias como la ocurrida la semana pasada. De entrada se interrogará a los altos funcionarios sobre la última visita de inspección de seguridad industrial al socavón en donde ocurrió el trágico hecho.

Postura oficial

En vista de la controversia que se formó por las declaraciones la semana pasada del ministro de Salud, Alejandro Gaviria, según las cuales "la marihuana puede ser más segura que el alcohol si uno tiene en cuenta todos los resultados de salud pública", un grupo de ONG que trabajan en rehabilitación de drogadictos está evaluando la posibilidad de enviarle un derecho de petición al integrante del gabinete para que, de manera oficial, se fije la posición del Gobierno frente a la peligrosidad o no de consumir este narcótico. “… No es un debate semántico ni melindroso, es una cuestión de fondo con implicaciones grandes”, dijo a EL NUEVO SIGLO el vocero de una de las ONG.

¿Y las monedas?

Un exintegrante de la junta directiva del Banco de la República dijo, en charla informal con varios periodistas del área económica, que un hijo suyo que vive en el exterior le había hecho una pregunta que lo puso a pensar. Relató que su hijo había visto en Europa una noticia según la cual Colombia iba a importar casi 100 millones de monedas, sobre todo de las denominaciones de 500 y 1.000 pesos, ante la escasez de las mismas en el mercado nacional, lo que había llevado al gremio de los comerciantes a advertir los problemas que se estaban generando en el día a día porque no había cómo devolver el cambio o hacer transacciones muy bajas.

¿Y no los rompen?

Relató el economista que su hijo que no es economista sino que estudia artes, le preguntó que si la escasez de las monedas se había generado porque las personas que recibían estas monedas no las recirculaban sino que las ahorraban en alcancías, pues no había que importar más monedas, ya que al fin del año el 90 por ciento de los ‘marranitos’ se rompen y la gente gasta lo que pudo ahorrar. Como la explicación no fue muy convincente, entonces le agregó que la situación económica del país ha mejorado tanto que ahora los ‘marranitos’ son más grandes y tardan mucho tiempo en llenarse, lo que retrasa que las monedas vuelvan al mercado ¿Será?

Primer lote

Para cerrar el tema de las monedas, lo cierto es que precisamente a comienzos de este mes debe estar llegando desde Eslovaquia el primer lote de las monedas que fue adquirido. Si bien Colombia tiene su propia fábrica en Ibagué, y esta trabaja a todo ritmo, no alcanza para suplir la demanda y más aún al acercarse el final del año y el pico de compras decembrinas.