Durante la administración del alcalde Enrique Peñalosa se han plantado más de 86.361 árboles en toda la ciudad. La idea es arborizar de forma segura y responsable a través de estrategias como Plant y Restauración Ecológica.

En cuanto a la tala, por cada árbol que es removido debido a sus condiciones y el peligro de caída que representan para la ciudadanía, se han  plantado ocho.

Cabe destacar que durante este Gobierno se han plantado 86.361 árboles en Bogotá: 42.472 en zonas de restauración ecológica, 9.664 en espacio privado, 10.938 replantes y 23.287 en espacio público.

De acuerdo con el Jardín Botánico, en la ciudad prima la arborización por encima de la tala, ya que esta es la última medida a la que se llega, y se ejecuta cuando el árbol presenta enfermedades y afectaciones irreversibles. De hecho, de las últimas tres administraciones, esta es la que menos árboles talados registra.

Mediante el programa Bogotá Positiva se hicieron 8.529 talas de árboles, en la Bogotá Humana se talaron 13.386 y en la Bogotá Mejor para todos, se han talado 10.714 árboles.

Valoración

“Hace tres años el Jardín Botánico hizo una valoración del arbolado urbano en Bogotá, el diagnóstico arrojó 53.000 árboles enfermos y son los ingenieros forestales de la Secretaría de Ambiente quienes determinan cuál es el procedimiento seguir, luego de realizar una identificación detallada”, aseguró la directora del Jardín Botánico, Laura Mantilla.

Esta acción se realiza en árboles con rebrotes, necrosis, plagas, enfermedades y en muchos casos porque han sido mal emplazados y crecen en malas condiciones, así que para evitar accidentes son removidos.

De hecho, antes de tomar la decisión de intervenirlos, se realizan tratamientos de manejo de plagas y fitosanitarios para salvarlos.

Socialización

Además, estas medidas son socializadas con la comunidad en donde se realizan las talas. La última se desarrolló con los residentes de la Carrera 9.

“Nuestra responsabilidad es generar una cobertura arbórea sana, saludable para que nos beneficie a todos y mejorar la calidad ambiental, y urbana”, agregó Mantilla.

Plantaciones

La idea es sembrar árboles que resistan el estrés urbano. La entidad destaca que investigaciones han determinado que las especies más resistentes a condiciones complejas son: los falsos pimiento, liquidámbar, pino romerón, roble, nogal, cedro, guayacán de Manizales, chicala y palmas de cera.

Asimismo, estas ofrecen seguridad y visibilidad para los conductores y peatones en la ciudad, al ser de porte alto.

Las 3 estrategias de plantación

Plant: busca desarrollar una arborización de forma organizada en el espacio público con especies adecuadas. Además, convoca a la ciudadanía para que participe en jornadas de plantación.

Restauración Ecológica: este proyecto se implementa en los cerros y en áreas piloto de restauración. El objetivo es llegar a sitios gravemente afectados para implementar acciones que permitan su recuperación.

La plantación de buganvilias: este programa se planeó para barrios con pocas coberturas vegetales y no aptas para ser arborizados, pues cuentan con poco espacio para especies de gran tamaño. Siendo las enredaderas la mejor opción para estos sitios.

Con estas estrategias se plantaron 23.287 árboles en espacio público, 42.472 en restauración ecológica, 9.664 en espacio privado y se adelantaron 10.938 replantes.

En la Novena

Con la plantación de 32 árboles, la Alcaldía de Bogotá inició la arborización de la Avenida 9, que contará con un total de 101 árboles nuevos. Esta primera fase se desarrolló entre las calles 72 y 85.

En esta ocasión los pioneros de la jornada fueron 15 niños,  quienes acompañados por sus padres, llegaron con dibujos y mensajes simbólicos alusivos a los árboles.

De esta forma los ciudadanos se sumaron para darle vida a este tramo con 22 robles y 10 liquidámbares. Por sus características, son las especies que mejor se adaptan a las condiciones del suelo y estrés urbano de la ciudad.

De otro lado, la Alcaldía de Bogotá acató la sugerencia de la Personería capitalina de suspender temporalmente la tala de árboles en la Carrera 9. Sin embargo, llamó la atención sobre la importancia del mantenimiento y supervisión que hay que hacerles para evitar accidentes que pongan en riesgo la seguridad y la vida de los bogotanos.

Al respecto, el subsecretario de Ambiente, Óscar López, señaló que se esperará el acompañamiento de la Personería para que se revise el programa de talado que se lleva a cabo de manera preventiva. Según el funcionario, en lo corrido de 2018 se han caído más de 570 árboles en la ciudad.

“Por esta razón es que la intervención de los árboles es necesaria para garantizar la seguridad de los ciudadanos”, sostuvo.

“No podemos descuidar el arbolado urbano y dejar a los ciudadanos a la suerte de lo que pueda pasar. El pasado 6 de agosto se cayeron 31 árboles por las condiciones climáticas. La situación puede ser más grave si no se hace la labor que adelanta el Jardín Botánico y la Secretaría Distrital de Ambiente”, explicó López.

Difusión

También aseguró que la exigencia de la Personería es que se realice una mayor difusión a la ciudadanía sobre los procedimientos de mantenimiento. Sin embargo, el Jardín Botánico ha adelantado los procesos de sensibilización y socialización con la comunidad sobre la intervención que se adelantan en la Carrera 9 y en toda la capital.

“El Jardín Botánico va a solicitar, a través de una carta a la Personería, que defina cuáles son los parámetros que exigen para el proceso de socialización”, agregó el Subsecretario.

Cabe destacar que la Secretaría de Ambiente, en la Subdirección de Silvicultura Flora y Fauna Silvestre, cuenta con 57 ingenieros forestales, además de un equipo de biólogos y técnicos expertos que apoyan esta labor, por lo que la entidad da un parte de tranquilidad sobre el trabajo que viene realizando.

El Subsecretario, a su vez,  hizo un llamado para que se apoyen estas acciones, pues insiste en que es un tema preventivo.

“Hay que revisar las estadísticas de los árboles volcados en la ciudad. Bogotá tiene aproximadamente 1.200.000 árboles en el espacio público, por lo cual es necesario su mantenimiento para que no se conviertan en un riesgo para los ciudadanos. Revisemos los vientos y la época en la que estamos, esto es fundamental para la seguridad de todos los bogotanos”, concluyó el funcionario.