SIGUEN LAS reacciones por la realización el pasado lunes del día cívico que decretó el presidente Petro, a pesar de que la Selección Colombia perdió la final de la Copa América de Fútbol con Argentina. EL NUEVO SIGLO consultó voces de distintos sectores, pues hay quienes consideran que no se justificaba llevarlo a cabo, ya que paralizó algunas dependencias públicas y afectó actividades en el transporte, el comercio y los exportadores.
El mandatario dijo el pasado viernes, que “nos acercamos al 20 de julio. La Selección Colombia es un símbolo de unidad, no de violencia ni polarización. La bandera de Colombia es la de la unidad, así que el día lunes, día de la victoria, se festejará con un día cívico que pensamos como el día de la unidad”.
Sector transporte se afectó
Alfonso Medrano, presidente ejecutivo de la Asociación Colombiana de Camioneros, dijo a este Diario que se vieron perjudicados “enormemente porque se cerraron todas las entidades públicas, secretarías de tránsito, puertos. O sea, todo lo que fue empleados públicos cerraron, y nosotros dependemos mucho del sector público para poder despachar cargas, para poder mover cargas. Entonces ayer (lunes) fue un día completamente perdido e inoficioso que se haya decretado un día cívico. Porque queremos la Selección, queremos el deporte, pero la economía se paraliza un día”.
Agregó el dirigente del transporte que vienen golpeados con “tanto obstáculo en la vía, trancones, bloqueos, economía a la baja, y un día más, pues lógico nos perjudicó tenazmente porque prácticamente estamos empezando la semana hoy (ayer)”.
Medrano estimó que la actividad del transporte de carga por carretera se vio disminuida en “por lo menos un 60% a nivel nacional porque muchos transportadores, como toca sacar los viajes con legalidad, con todo, y no la había porque no fueron a trabajar los funcionarios públicos. Fue un día completamente perdido y el país no está para que perdamos tiempo”.
Por su parte Camilo Herrera Mora, presidente de Raddar y experto en consumo, dijo a este Medio que “el día cívico no es un día festivo, es un día de celebración que algunas instituciones públicas y privadas podrían declararlo como no hábil, pero no era obligatorio. No tengo aún información de cuánta gente trabajó el lunes y cuánta no”. En cualquier caso, consideró que “no creo que el 10% de los puestos de trabajo hayan aplicado al día cívico”.
Agregó el experto que “todo día que no sea laboral afecta la productividad de algún sector. Entonces, si el objetivo de decretar el día cívico logra compensar esa productividad, pues no hay un problema, pero Colombia es un país lleno de festivos donde dar un festivo adicional, inevitablemente va a afectar la productividad de las empresas”.
Además, Herrera mencionó que “no soy amigo de los días cívicos en función de que la gente no trabaje, pero hay días cívicos que tienen sentido declararlos, pero no necesariamente vincularlos a que la gente trabaje o no, como el Día de la Mujer es un día cívico, pero la gente trabaja”.
En tanto que el presidente de Analdex (Asociación Nacional de Comercio Exterior), Javier Díaz, dijo frente a la pregunta de este periódico si el día cívico afectó esta actividad, que “no tengo reporte de que se ha visto afectada la actividad, creo que la gente logró acoplarse a eso porque de todas maneras las actividades en puerto y las actividades que tenían que ver con los trámites de exportación se cumplieron. Lo que no había era despacho de oficina”.
Empero, Díaz recordó que “lo manifesté desde antes que se anunció la posibilidad, que nosotros no estábamos de acuerdo. Creo que Colombia es un país que tiene que ver cómo supera los niveles de pobreza, y eso se logra trabajando. Y entonces, declarar día cívico, declarar festivos cuando lo que se requiere es que la economía tenga más dinámica, creo que no resulta conveniente”.
Hay quienes consideran que decretar un día cívico por un gran triunfo deportivo o hecho importante en otro campo, no es conveniente porque envía un mal mensaje a los ciudadanos frente al deber implícito que tienen con sus responsabilidades en el trabajo y demás actividades.
Entretanto, el sociólogo Hugo Acero expresó a EL NUEVO SIGLO que, por ejemplo, “viene el papa, entonces va a haber un día y una liberación de presos, o ‘no pago impuestos porque alguna vez me van a condonar esos impuestos o alguien dice que hay una amnistía’. De alguna manera se relacionan este tipo de actitudes con cierta irresponsabilidad, que a los ciudadanos les gusta. Se va generando una actitud muy de oportunidad, o sea no cumplo y en algún momento me darán un día libre”.
Vale señalar que cada día la economía colombiana produce cerca de $4 billones. Teniendo en cuenta los datos definitivos solo para 2022, al año el Producto Interno Bruto del país es de $1.462 billones a precios corrientes. Al dividir esa cifra por 365 días del año, el resultado del PIB diario es de $4 billones.
El lío de Jesurún
Por otro lado, la Federación Colombiana de Fútbol se pronunció ayer tras su presidente Ramón Jesurún recuperar la libertad, pues fue detenido junto con su hijo, Jamil, por un enfrentamiento que tuvieron con guardias de seguridad norteamericanos el domingo en las postrimerías del encuentro en que Argentina derrotó a Colombia un gol por cero, coronándose campeón de América.
“Empleados de la seguridad privada del estadio, impidieron el acceso oportuno y directo a la gramilla a la mayoría de integrantes de la delegación colombiana, a pesar de estar debidamente identificados con la escarapela oficial de la organización, lo que generó el reclamo de algunos de manera vehemente, porque la premiación empezaría en minutos”, aseguró la Federación.
Agregó el ente rector del fútbol que “el presidente de la Federación, Ramón Jesurún impulsado por su instinto paternal, pues uno de los reclamantes y posteriormente reducido por los guardias fue su hijo Ramón Jamil, se apresuró a reclamar por lo sucedido, pero terminó desbordado por la situación, al encontrarse en el corredor con su esposa, hijos, hijas y nietos menores de edad”.
Por su parte, Ramón Jesurún dijo tras salir de una corte en Miami-Dade y recuperar la libertad bajo fianza junto con su hijo, aunque siguen vinculados al proceso, que “mi credencial dice acceso total y un guardia de seguridad de esos que quiere hacerse el importante lo desconoció. Le insistí que podía entrar y me empujó. Y ahí se armó un tumulto ridículo e injusto donde atropellaron niños. Yo a nadie golpeé, yo me defendí, miren el vídeo donde se ve que somos ultrajados”.
La Policía de Miami dijo en su reporte que Jesurún estaba “furioso” y empujó a un guardia que le puso una mano sobre él para que retrocediera. Mientras que su hijo es acusado de sujetar a un guardia por el cuello y tirarlo al piso, donde supuestamente le pegó y pateó.
El reporte también indica que dos guardias de seguridad que intervinieron supuestamente fueron agredidos por Jesurún y su hijo. Los dos colombianos enfrentan tres cargos de delitos graves de agresión y tienen audiencia en la Corte de esta ciudad el próximo 14 de agosto.
En tanto que se espera la decisión de la justicia de Estados Unidos sobre 27 personas que protagonizaron desmanes en el estadio Hard Rock al ingresar a la fuerza y sin boleta para ver el partido, la mayoría de ellos colombianos. Podrían ser deportados y ver afectada la visa.
La Conmebol, la entidad rectora del fútbol suramericano, indicó en una misiva que envió al Cónsul de Colombia en Miami, que “las autoridades de Estados Unidos podrán ejercer acciones legales en materia civil y penal o de otra índole, por actos de violencia cometidos dentro y fuera, al igual que a las afueras del estadio donde se desarrolle el encuentro”.
Igualmente, no se descartan sanciones de la FIFA o la Conmebol por estos hechos a la Selección Colombia para sus juegos en Barranquilla.
De hecho, el estadio Metropolitano no tendrá en septiembre próximo el aforo completo para el partido contra Argentina de la eliminatoria al Mundial del 2026, porque en enero pasado el Comité de Disciplina de la FIFA sancionó con el cierre parcial de campo en su próximo partido a las selecciones de Argentina, Chile, Colombia y Uruguay, por incidentes en los partidos de clasificación para el Mundial 2026.