Debido a las protestas y manifestaciones que se realizaron en el país entre el 14 y 15 de febrero, el consumo durante el mes cayó 13 %, de acuerdo con el último reporte del Bancolombia.

En términos nominales la disminución fue del 1 %. De acuerdo con los registros, la última vez que se presentó un balance negativo se debió a la existencia de un efecto base asociado a las jornadas de los Días sin IVA de 2021. Para el caso de la semana entre el 9 y el 15 de febrero, los resultados reflejan un proceso de ajuste a la baja con una disminución real anual del 10 %, manteniendo la tendencia observada desde el segundo semestre de 2022.

La compra promedio es una buena medida para entender los efectos de la inflación, particularmente en lo relacionado con una menor capacidad de compra por parte de los hogares. Por ejemplo, en lo corrido de febrero, el crecimiento anual en términos nominales es del 6 %; sin embargo, en términos reales el balance es negativo, con una disminución del 7 % con respecto a 2022.

Las regiones con el promedio más alto de consumo durante la semana del 9 al 15 de febrero fueron Oriente y Centro. En contraste, el registro más bajo le corresponde a Bogotá y Cundinamarca.

A su vez, Bogotá y Neiva fueron las ciudades con el mejor desempeño con un crecimiento real del 5 % y 2 %, respectivamente. En contraste, las demás ciudades del grupo de referencia presentaron disminuciones en los niveles de consumo, especialmente en Armenia, Santa Marta y Pasto. Para el caso de la capital de Nariño es importante tener en cuenta los efectos de la crisis generada por el cierre de la vía Panamericana.

Categorías

Las categorías con el mejor desempeño fueron las relacionadas con domicilios, pagos en línea, entretenimiento, deportes y viajes, con crecimientos reales por encima del 10 %. En contraste, el peor desempeño le corresponde al segmento de seguros, movilidad, tiendas por departamento, moda, hogar y tecnología.

Para el caso de las categorías relacionadas con tiendas por departamento, moda, hogar y tecnologías, los resultados reflejan los efectos de la coyuntura actual de incrementos en los costos de financiación, una menor capacidad de compra por parte de los hogares y una menor intención de adquisición de bienes durables.

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La demanda de compras durante el mes referenciado presenta una serie de cambios: tiendas por departamento y hogar y tecnología ceden terreno con respecto a febrero de 2022. Por el contrario, el gasto en los rubros relacionados con entretenimiento y educación han incrementado su participación sobre el total de las compras.

De otro lado, y como resultado de la caída durante este año, el consumo de leche en Colombia se enfrenta este año con caídas de sus principales indicadores de comercialización.

Un estudio del grupo de investigaciones económicas de Bancolombia muestra que el escenario inflacionario en el país afecta por un mayor precio de la leche al consumidor.

La leche

La factura empieza a pasar cuentas también para las ventas de la industria. Datos del DANE permiten ver que las ventas de leche en Colombia cayeron 2,8 %, 9,4 % y 8,3 % en octubre, noviembre y diciembre, respectivamente.

El punto está en que estas caídas, por un menor consumo de leche en Colombia, podrían continuar en parte de 2023, llevando a que el crecimiento de la industria láctea nacional esté por debajo del 2022, momento en el que cerró en términos reales con un repunte del 1,2 % en producción y se contrajo 0,5 % en ventas.

“El acopio de leche acumulado a noviembre creció 9,2 %, pero esa cifra por sí sola dice poco. Lo primero que se resalta es que Antioquia, principal productor nacional, apenas crece 1 %”, señala el documento.

Sin duda se ha dado por la contracción del consumo de leche en Colombia, pero también por dificultades financieras de los ganaderos en 2021 y el exceso de lluvias por La Niña.

“En contraste, Boyacá creció 17 %, Nariño 9 % y el agregado del resto de regiones 20 %. Adicionalmente, el comportamiento mes a mes ha empezado a cambiar”, añade el informe.