EL PUNTO de partida para la discusión sobre el alza del salario mínimo para 2025, podría empezar desde 6,2%, como lo propuso el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla.
A esa base el ministro llegó al señalar en el congreso de Asofiduciarias, que “es probable que la inflación del mes de noviembre termine en 5,2%, esto más el punto de productividad, significaría que si se sigue la tradición colombiana estaría en 6,2%. Por más que haya algún ajuste, nunca podrá estar en doble dígito”.
Pero mientras para el Gobierno 6,2% es el punto de partida, para los empresarios ese sería el punto de llegada, como ya algunos han expresado a este Diario de forma extraoficial.
Con esta posición del Gobierno, de entrada, queda descartada la posición de los sindicatos, como la presentada por el presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Fabio Arias, quien anticipó que apostarán por una subida del 15%.
Los empresarios
No obstante, los empresarios ya han señalado que no hay un buen ambiente para la negociación este año. El presidente de Fenalco, Jaime Alberto Cabal, expresó su preocupación y alertó de los riesgos que podría tener un aumento salarial desmedido para las empresas y para la economía en general.
“Particularmente este año nosotros somos muy pesimistas, porque ya el Ministerio de Trabajo y la ministra mostraron el talante de no gustarle la concertación, es decir, con el proyecto de reforma laboral que nunca fue concertado, como es obligatorio que hubiera pasado por la Comisión de Concertación laboral, sino que fue básicamente concertado con los sindicatos, no con los empresarios”.
Raúl Ávila, experto en Economía y Regulación, dijo que “la subida del salario mínimo estará acompañada de inflación y lo que se espera que aumente la productividad del año que no será muy alta, entonces la subida podría ser cercana a un poco más del 6%”.
Eso sí, el experto aclaró que el dato no será ajustado altamente como lo fue para 2024, porque tendrá retos para ser definido.
Incrementos
En los últimos incrementos del salario mínimo el Gobierno actual, prefirió hacerlo por casi tres puntos arriba de la inflación causada. En 2022, el aumento fue de 10,07% con una inflación que cerró el 2021 en 5,62%; el alza del 2023 fue de 16% con una inflación que cerró en 2022 en 13,12%. Y, por último, el aumento de 2024, de 12,07%, con una inflación de 9,3%.
Asimismo, en la cifra del nuevo salario, uno de los factores es también el índice de productividad. Por ejemplo, en 2020 fue de 0,73%, en 2021 llegó a 0,64%, y en 2022 quedó en 0,8%. Y para el 2023 el indicador fue de 0,76%, que fue el que se tuvo en cuenta para el salario de 2014.
José Fernando Sandoval, manager de Legal de la firma BDO en Colombia, considera que este aumento tendrá un impacto significativo en la economía colombiana, dada la cantidad de fuerza trabajadora que recibe el salario mínimo o menos al mes.
Según cifras reportadas por el DANE y el Ministerio de Trabajo, en Colombia hay 2,24 millones de personas que reciben un salario mínimo.
“Asuntos como el poder adquisitivo de los trabajadores y el aumento de los costos laborales para los empleadores son dos de los temas fundamentales en el marco de este debate”, aseguró el experto.
Sobre las implicaciones para los trabajadores y empleadores ante la discusión sobre el incremento del salario mínimo en el país, los expertos señalan que, para los trabajadores, cuyo salario sea el mínimo mensual o para aquellos que tengan su sueldo pactado en salario mínimo, traerá un aumento o nivelación en la capacidad adquisitiva respecto de la inflación.