LA INCLUSIÓN política es el tema que más proyectos concentró, con 20 de los 67 tramitados en el primer periodo de la presente tercera legislatura, el cual finalizó el pasado lunes. Le siguieron autorreforma del Congreso, con 12 iniciativas; transparencia y control social, así como elecciones y mecanismos de participación, con 9 cada uno; función pública, con 8; sistema de partidos, con 7, y enfoque territorial con 2, según el seguimiento que le hace la Misión de Observación Electoral (MOE) a la actividad del Senado y la Cámara.
En cuanto al estado de estos proyectos, la MOE da cuenta que 11 sobreviven de la segunda legislatura 2023-2024. De los mismos, dos fueron aprobados en el periodo congresional que acaba de finalizar y nueve continuarán en trámite a partir de febrero del próximo año.
Mientras que de los 56 proyectos que fueron radicados desde el pasado 20 de julio, cuando comenzó el primer periodo de la tercera legislatura, uno fue aprobado, 36 continúan en trámite y 19 se hundieron, en la mayor parte de los casos por falta de trámite.
Inclusión política
En el primer periodo de esta legislatura se presentaron nueve proyectos para mejorar la participación política de la mujer, que se mantiene baja pues en el actual Congreso no supera el 30 %.
Dos proyectos de reforma constitucional, uno para la paridad en las corporaciones públicas y el otro para también la paridad en las listas, se hundieron.
El único proyecto de estos que fue aprobado en el periodo señalado es el que establece la licencia de maternidad para las mujeres en política.
En tanto que continúan en trámite en el segundo periodo de esta legislatura el proyecto de honores a las sufragistas (las primera mujeres que ejercieron el voto en el país en los años 50), al cual solo le resta un debate para ser ley de la República; el estatuto de igualdad de niñas y mujeres; contra la violencia de género digital; la paridad de la mujer en la política; la capacitación funcionariado en VBG y justicia con enfoque de género.
También se presentaron cinco proyectos sobre participación política étnico-racial, de los cuales de reforma constitucional se hundieron dos encaminados a establecer la circunscripción afro en Senado. Mientras que siguen en tránsito al próximo periodo la cátedra afrorraizalidad, participación étnico racial en máximos niveles decisorios y la creación de la comisión legal de pueblos indígenas.
Igualmente pasan para estudio en el siguiente periodo cuatro proyectos para incentivar la participación política de la juventud: fortalecimiento de los consejos de juventud, dos iniciativas acerca del estatuto de ciudadanía juvenil y la participación de juventudes rurales.
En tanto que archivaron dos proyectos de reforma constitucional sobre participación política de personas en condición de discapacidad: uno que creaba la circunscripción personas con discapacidad y el otro para incentivar esta participación.
Autorreforma del Congreso
La reforma del Congreso es el segundo tema que concitó más proyectos en el primer periodo de esta legislatura, como se dijo con 12 iniciativas. No obstante, pocos son los avances, porque diez quedan en tránsito, ocho de las cuales apenas con ponencia para primer debate y dos aprobados en primer debate.
Los proyectos de acto legislativo con este propósito que se hundieron fue uno que endurecía las sanciones por inasistencia parlamentaria y otro sobre moción de censura.
Los que siguen para discusión el próximo año en este acápite son talento humano en unidades de trabajo legislativo, ajustes a la Comisión de Acusación, asistencia de los congresistas, formación de congresistas, control de asistencia en el Congreso, independencia del Congreso, reforma a la Ley Quinta o Ley del Congreso, profesionalización de UTL, consultas del Congreso al Consejo de Estado y fortalecimiento del control político.
Transparencia y control social
En materia de transparencia y control social se radicaron nueve iniciativas, de las cuales hundieron una reforma constitucional que buscaba la eliminación de las contralorías regionales y que quedara la del orden nacional. Mientras que fue aprobado un proyecto de ley sobre el control fiscal a las regalías.
Siguen en la discusión el próximo año el proyecto sobre denunciantes de hechos de corrupción, el de anticorrupción en la contratación estatal, la regulación del cabildeo, la regulación de las asociaciones público-populares, uno sobre enlaces y cabilderos, la reforma a la contratación estatal y el fortalecimiento de las JAL.
Elecciones y mecanismos de participación
En este asunto se radicaron nueve proyectos, de los cuales dos de reforma constitucional se hundieron: la curul internacional y las curules del Estatuto de la Oposición.
Quedan en tránsito el proyecto sobre interpretación de inhabilidades, propaganda electoral en la radio y televisión comunitaria, encuestas de carácter político y electoral, democracia en proyectos extractivos, revocatoria de mandato, debates en campañas electorales y financiación de campañas de grupos significativos de ciudadanos.
Función pública
Fue una de las temáticas que más proyectos de reforma constitucional produjeron en el periodo que recién finalizó, con cuatro, aunque todos se hundieron: requisitos mínimos para altos cargos, elección del procurador general de la Nación, requisitos para ministros y directores de departamentos administrativos, y limitación de derechos políticos.
Quedan en tránsito el proyecto que mejora los honorarios de los concejales de los municipios más pobres, que le falta la aprobación en un debate para convertirse en ley; una iniciativa para mejorar la calidad normativa; elección de personeros e incompatibilidad de gobernadores para desempeñar el cargo.
Sistema de partidos
Una muestra de que en este Congreso tampoco habría ambiente para la reforma política y en materia electoral es que fueron archivadas cuatro iniciativas de acto legislativo: el proyecto que presentó el Gobierno, la reforma al Consejo Nacional Electoral, la iniciativa que impulsó el Pacto Histórico y la que modificaba el Estatuto de la Oposición.
No obstante, sigue en tránsito para segunda vuelta un proyecto de reforma política que ha hecho eco en las bancadas, principalmente porque tiene el ‘gancho’ de permitir el transfuguismo para las elecciones del 2026, es decir, que los congresistas puedan aspirar por un partido distinto al que hoy representan en el Parlamento, sin tener que renunciar a la curul.
También siguen su estudio en el segundo periodo de esta legislatura dos proyectos de ley: uno que define los derechos de la bancada independiente y uno más sobre doble militancia.