EL TENIENTE coronel de la Policía Óscar Darío Dávila Torres, quien estaba siendo indagado por el caso de las interceptaciones telefónicas ilegales a Marelbys Meza, exniñera de Laura Sarabia, exjefa de Gabinete de Gustavo Petro, apareció muerto en su vehículo en Bogotá.
Las primeras versiones extraoficiales dan cuenta de que Dávila, quien fungía como coordinador de Protección Anticipativa de la Presidencia de la República, pidió a su escolta parquear en un sector de la localidad de Teusaquillo, en la calle 22 Bis con carrera 48, para que le comprara una botella de agua en una tienda. Al retornar, el escolta lo encontró muerto de un disparo.
Inicialmente la Fiscalía no proyectó ninguna hipótesis sobre las circunstancias del fallecimiento del alto oficial, aunque trascendió que el caso será asumido por un grupo de investigadores interdisciplinarios, asignados prioritariamente dada la delicadeza del caso.
A través de un comunicado, la Policía Nacional confirmó la muerte del teniente coronel Dávila Torres, al tiempo que lamentó los hechos. El ente aseguró que “la investigación será adelantada por la Fiscalía para determinar las circunstancias de modo, tiempo y lugar” del deceso del uniformado.
Algunas versiones de prensa anoche señalaban la posibilidad de un suicidio, pero se desconocían los reportes forenses sobre el tipo de herida que presentaba el oficial, si esta fue producida por su arma de dotación o fue atacado por un tercero. Esas circunstancias solo serán aclaradas cuando Medicina Legal presente el informe forense.
Aunque Dávila Torres no figuró en el grupo de cuatro integrantes de la Policía que rindieron testimonio en la Fiscalía la semana pasada alrededor del caso de una prueba de polígrafo a Meza, en los sótanos de la Casa de Nariño, así como de la interceptación ilegal al teléfono de la exniñera y otra exempleada doméstica de Sarabia, se sabía que la Fiscalía iba a citarlo para que explicara qué conocimiento tenía de todos estos hechos, dado su cargo en el equipo de seguridad presidencial.
En las pesquisas que adelanta Procuraduría al respecto, el oficial también estaba siendo indagado, así como otros integrantes del cuerpo de seguridad presidencia.
Quería declarar
Anoche mismo, después de conocerse la noticia de la muerte del teniente coronel, empezó a circular una carta que Dávila Torres había enviado a la Policía el pasado 2 de junio, en la que informaba que estaba dispuesto a colaborar con las investigaciones.
En la misiva expresó su “absoluta disponibilidad para presentarme ante el despacho del ente investigador que se me indique, a fin de rendir entrevista con ocasión de los hechos de público conocimiento, socializados en los últimos días, a través de los medios de comunicación y que involucraron a altos funcionarios de la Presidencia”.
A renglón seguido indicó que "en virtud del cargo que desempeño considere necesaria mi vinculación como indiciado, atendiendo los criterios interpretativos desarrollados por la Corte Constitucional, mediante sentencia C-025 de 2009, que, a su vez, recoge lo señalado en la C-799 del 2005, solicito se me informe tal condición y reitero mi disponibilidad de presentarme en fecha y hora que se señale para ser escuchado en diligencia de interrogatorio".
En ese sentido, reiteró su “interés de colaborar con la correcta administración de justicia y, en consecuencia, como responsable de la coordinación de protección anticipativa de la jefatura de protección presidencial, me pongo a su completa disposición para contribuir al esclarecimiento de los hechos que son materia de investigación”.
Finalmente, el teniente coronel Dávila Torres entregó, como es habitual en misivas como esta de colaboración, sus datos de residencia en caso de ser requerido. Reportó, precisamente, un inmueble ubicado en la calle 22 Bis con carrera 48, es decir, casi en el mismo lugar en donde la noche de este viernes habría parqueado su vehículo y luego fue hallado sin vida.
Reacciones
Dado la importancia que tenía el testimonio del uniformado para esclarecer quién ordenó las chuzadas ilegales y las pruebas de polígrafo a las exempleadas de Sarabia, su sorpresiva muerte generó una gran controversia anoche, con muchas versiones y especulaciones circulando en las redes sociales.
Hasta el cierre de esta edición, ni la Casa de Nariño ni el presidente Gustavo Petro se habían pronunciado al respecto, pese a que se trataba de un alto oficial al servicio de la Presidencia de la República.
Dirigentes políticos como el exprecandidato a la Presidencia Federico Gutiérrez se pronunciaron en torno a la muerte de Dávila. Aseguró que el caso es “demasiado grave” pues, a su juicio, “se trata de un entramado que pone en peligro a todos los implicados. El país necesita la verdad”. Aprovechó la ocasión para enviar un mensaje de solidaridad a la familia del coronel fallecido.
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Antecedentes
La muerte del teniente coronel de la Policía fue reportada días después de que se iniciara la investigación formal sobre interceptaciones ilegales o chuzadas a los teléfonos de Marelbys Meza y Estella Fabiola Perea, dos exempleadas de la exjefa del Gabinete presidencial, Laura Sarabia, por la pérdida de 4000 dólares en efectivo en la residencia de la exfuncionaria.
El hecho generó un escándalo de enormes proporciones, por lo que la Fiscalía intervino citando a interrogatorio a cuatro uniformados el sábado 3 de mayo, aparentemente relacionados en las chuzadas contra las exempleadas de Sarabia. Uno de ellos fue el mayor John Jairo López Tolosa, integrante del equipo que lucha contra el crimen organizado de la Dijín.
Este primer interrogatorio permitió establecer las circunstancias que hicieron que un juez de Control de Garantías ordenara las interceptaciones a los teléfonos tanto de Meza como de Perea, tras solicitud de un fiscal especializado de Quibdó.
La Fiscalía denunció que un investigador de la Sijín indujo al error al fiscal de Quibdó, pues le indicó que los dos teléfonos pertenecían a alias ‘La Cocinera’ y alias ‘La Madrina’, quienes serían personas de confianza del anillo de seguridad de alias ‘Siopas’, uno de los principales jefes del ‘Clan del Golfo’.
Luego se vino a descubrir, según la Fiscalía, que se trató de una maniobra ilegal para espiar a las dos mujeres, que hoy se encuentran bajo protección del ente acusador. Alrededor de este caso se están llevando a cabo tres líneas de investigación. La primera, relacionada con la pérdida de 4 mil dólares, denunciado por Sarabia; la segunda, con referencia a la realización ilegal de pruebas de polígrafo a Meza en la Casa de Nariño; y la tercera, respecto a las maniobras fraudulentas para que se interceptaran los teléfonos de quien fuera la mano derecha del presidente Petro hasta hace pocos días, cuando fue retirada del cargo, junto al exembajador de Colombia en Venezuela, Armando Benedetti, debido a la gravedad de este escándalo.
Carta de Dávila a la Fiscalía
Óscar Darío Dávila Torres, identificado con la C.C .86.066.187, en mi calidad de Servidor Público, en el cargo de Teniente Coronel – Coordinador de Protección Anticipada de la Presidencia de la República, informa a usted mi absoluta disponibilidad para presentarme ante el despacho del ente investigador que se me indique, a fin de rendir entrevista con ocasión de los hechos de público conocimiento socializados en los últimos días a través de los medios de comunicación y que involucraron a altos funcionarios de la Presidencia de la República.
Así mismo, en el evento que en virtud del cargo que desempeño considere necesario mi vinculación como indiciado, atendiendo los criterios interpretativos desarrollados por la Corte Constitucional mediante sentencia C-025 de 2009, que, a su vez, recoge lo señalado en la C-799 de 2005, solicito se me informe tal condición, y reitero mi disponibilidad de presentarme en fecha y hora que se señale, para ser escuchado en diligencia de interrogatorio.
Todo lo anterior, en concreto, tiene su génesis en las denuncias y publicaciones presentadas por la revista "Semana" que tratan sobre el caso de la jefa del Despacho Presidencial Laura Sarabia, en los que presuntamente vinculan a la Jefatura para la Protección Presidencial.
Reitero mi interés de colaborar con la correcta administración de justicia y, en consecuencia, como responsable de la Coordinación de Protección Anticipativa de la Jefatura de Protección Presidencia, me pongo a su completa disposición para contribuir al esclarecimiento de los hechos que son materia de investigación.
La carta completa emitida por el Teniente Coronel: