La casa no está en orden: Comité Autónomo de Regla Fiscal | El Nuevo Siglo
Según la CARF cualquier gasto que exceda el límite de regla fiscal deberá estar acompañado de nuevos ingresos.
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Miércoles, 29 de Junio de 2022
Redacción Economía

Pese a que el Marco Fiscal de Mediano Plazo (MFMP) muestra una senda decreciente del déficit fiscal que es consistente con lo exigido por la transición de la regla fiscal, no hay que perder de vista que los saldos rojo observados son muy altos, es decir, "la casa no está aún en orden".

Así califica el Comité Autónomo de Regla Fiscal (CARF) su evaluación sobre el MFMP. El organismo, que vela por la sostenibilidad de las finanzas públicas del país, afirmó en su pronunciamiento que el MFMP 2022 da cuenta del esfuerzo del Gobierno nacional para consolidar las cuentas fiscales tras la pandemia del covid-19, de acuerdo con las necesidades de inversión y gasto y con las restricciones presupuestales, de financiamiento y aquellas propias de la regla fiscal, logrando un ajuste significativo del déficit para 2022.

La aplicación de la fórmula de la regla fiscal que empezará desde 2026, cuando termine la transición, exigiría la necesidad de un déficit 2% del PIB menor al que se tiene programado en 2022.

Hace un año se proyectaba un desbalance de $83 billones en las cuentas de la Nación, y hoy, gracias al buen crecimiento económico, los altos precios del petróleo y la gestión de la DIAN, el Marco Fiscal de Mediano Plazo prevé un déficit de $75 billones.

Endeudamiento

Señala el Comité que "pese a estos resultados, los déficits producidos en los años de pandemia, la depreciación del peso y la inflación han llevado el endeudamiento del Gobierno a niveles históricamente altos, al punto en que no sería prudente aumentar la deuda. Más de un cuarto de los ingresos tributarios de la nación deberán destinarse al pago de intereses en 2022. Esta obligación disminuye la capacidad del Gobierno de invertir en otros programas".

En este sentido, el Gobierno presentó un plan para el gasto primario que cumple con las metas de la regla fiscal, definidas para cuatro años de transición. Con este plan, además de reducir el déficit fiscal a 2,0% del PIB en 2024, la deuda neta caería de 60,8% del PIB en 2021, a 56,5%, 56,2% y 55% del PIB desde 2022 hasta 2024, año en el que se lograría llegar al ancla de la deuda neta según la regla fiscal.


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Sin embargo, en el tránsito a esos resultados, el Comité considera que "persisten riesgos importantes asociados a la necesidad de sostener los niveles actuales de inversión. Cualquier gasto que exceda los límites de la regla fiscal deberá estar acompañado de nuevas fuentes de ingreso. De igual forma, el plan deberá adaptarse si se consolida un escenario de condiciones macroeconómicas globales adversas que desvíen la senda planeada para la reducción de la deuda y los intereses".

Por otra parte, el cálculo del déficit del Gobierno Nacional Central, de 5,6% del PIB este año, no incluye la totalidad del déficit por pagar que se generará en 2022 por concepto del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles. Solo incluye lo causado al primer trimestre de 2022 ($6,3 billones).

Cambios

En consecuencia, el CARF propone un cambio metodológico para que la contabilidad del Gobierno Nacional Central incorpore la acusación de los déficits del FEPC. Es decir, que esta cuenta, que suma déficits multibillonarios, sea contabilizada de acuerdo con su causación, directamente en las cuentas del Gobierno Nacional Central, y haga parte del gasto de forma contemporánea a su causación para efectos de evaluar el cumplimiento de la Regla Fiscal de acuerdo con la Ley.

Finalmente, advierte que en este momento la consolidación de las finanzas públicas, que se logra con el cumplimiento de la regla fiscal, es necesaria para la estabilidad macroeconómica de Colombia. Con los altos déficits fiscales que se han observado como respuesta a la pandemia, la economía está necesitando niveles de ahorro externo muy altos, que serán difíciles de sostener en un contexto económico nacional y global en el que la liquidez será más escasa y costosa.

El Comité está conformado por los economistas Juan Pablo Córdoba, Olga Lucía Acosta, Sylvia Escobar, Fernando Jaramillo y María Fernanda Suárez como miembros expertos, y por los presidentes de las comisiones económicas del Congreso de la República como miembros alternantes, actualmente la senadora María del Rosario Guerra y el representante Wilmer Carrillo. El equipo técnico es dirigido por Andrés Velasco.