Camilo Herrera Mora* | El Nuevo Siglo
Sábado, 21 de Marzo de 2015

ASIMETRÍAS

Motos y bicicletas

Cada  vez es más común ver en nuestras ciudades personas andando en motos y bicicletas como nuevas formas de moverse en la ciudad, lo cual refleja un cambio cultural muy importante sobre el pensamiento de movilidad y una muestra del aumento de la capacidad adquisitiva de muchos; algunos dirían que como reflejo del fracaso en calidad del transporte público.

Estos fenómenos tienen un reto muy grande para las autoridades y es que deben ser regulados, porque al igual que los carros usan la vía pública y por ende deben pagar impuesto de rodamiento, tener SOAT para cubrir los costos de cualquier eventualidad y sobre todo exigir a sus conductores que respeten las normas, lo cual infortunadamente no lo hacen debido a que su tamaño y maniobrabilidad les permite ser carro o peatón según les convenga, y se desplazan por los andenes como lo hacen por las calles y carreras, sin importar el sentido de la vía y sin respetar los semáforos, señales de tránsito o al mismo peatón. 

Si una moto va por la ciudad debe ir en el mismo sentido de las vías y no andar por los andenes en sentido contrario ni mucho menos parquear sobre el andén, lo cual es prohibido para los carros, pero estos ideales se destrozan cuando vemos que los primeros que no cumplen con esto son los policías. Lo mismo ocurre con las personas que andan en bicicleta, con la diferencia de que en muchos casos prefieren tener actitud de peatón a la de automotor, quizá porque la locomoción del aparato es humana y creen que eso les da algún derecho. Algunos de los que manejan bicicleta tienen una actitud arrogante en la vía, quizá porque consideran que son moralmente superiores a los demás por no contaminar, por estar a la moda o por ser y no ser peatones, y esto los lleva a actuar de una manera que puede causarles serios problemas de relacionamiento con peatones, motos y carros; por otra parte los conductores de moto manejan de manera muy riesgosa para ellos y los demás.

Es fundamental apoyar el progreso de estos esquemas de movilidad pero lo es más que sus conductores respeten las normas, cumplan con impuestos y seguros obligatorios, porque el derecho a la movilidad conlleva deberes sobre los demás y el conductor mismo, o de lo contario, tendremos un problema enorme en vez de una solución. 

Colombianada. Es curioso cómo el éxito ambiental de los ciclistas se desvanece con incumplimiento de las normas.

@consumiendo

*Presidente de Raddar