DIEGO ARANGO* | El Nuevo Siglo
Jueves, 27 de Febrero de 2014

El drama de los huecos
 

 

Hay cosas en la vida que están mal y que si no se corrigen a tiempo se van volviendo una cultura y lo peor es que la gente se va acostumbrando a vivir con ello. Es el caso de los miles de huecos en Bogotá, tanto en las calles de la ciudad, como en los andenes. La cifra de muertos, heridos, mutilados y lisiados de por vida es alarmante, pues el uso y la falta de mantenimiento permiten que estos huecos se formen, agranden y permanezcan por siempre, siendo cada día más y más enormes, algunos verdaderos cráteres.
El ciudadano común como cualquiera de nosotros se pregunta: ¿por qué no tapan o arreglan los huecos? No hay respuesta.

En la vía que llega a mi casa donde vivo hace veintidós años hay un hueco en la calle. Con los vecinos hemos escrito, llamado y suplicado que lo tapen, no ha sido posible que en ocho mil días no haya existido uno solo para arreglar ese hueco. Los vecinos artesanalmente con cemento lo han tapado y por lógica ese arreglo falto de técnica no es completo, pues el hueco permanece pero sin tanto peligro. Otra solución son los tapahuecos callejeros que arreglan chambonamente los huecos, pero por lo menos lo hacen bajo su iniciativa por unas monedas que los carros les tiran. Esto es una vergüenza para la administración de una ciudad como Bogotá, que no solo tiene un alcalde mayor sino veinte alcaldes menores, uno por cada localidad. De verdad que no se entiende tanta negligencia, incapacidad administrativa, desidia y falta de responsabilidad.

Este drama criminal ofende a la ciudad, quienes pagamos impuestos nos preguntamos ¿por qué no lo hacen? Y la respuesta es que no hay plata y que el arreglo de la malla vial cuesta once billones de pesos y que eso equivale al 80 por ciento del presupuesto anual de la ciudad. Es cierto, pero eso lo dejaron crecer, jamás se ocuparon de ese fantasma que se asomaba y han pasado 20 o 30 años, quizás más y la cultura del hueco tomo fuerza. Ahora solo queda un plan de choque en que el Gobierno nacional deberá meterle mano y la voluntad de un alcalde que se le mida a resolverlo con decisión y solo así podremos recuperar las vías capitalinas y evitar los permanentes accidentes por esta causa.

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*Presidente Canal Teleamiga Internacional