La llegada de una nueva mascota es para muchas familias un momento lleno de felicidad; sin embargo, no hay que bajar la guardia en sus cuidados durante las primeras semanas tras su nacimiento. Es importante que en esta etapa los adultos responsables de sus cachorros conozcan las necesidades básicas de higiene que requieren y así evitar inconvenientes a futuro.

Frente a esto, el doctor Javier Rivas, médico veterinario de la Clínica de Veterinaria de Unisalle, comparte algunas recomendaciones para esta etapa de la vida de los perros y gatos recién nacidos.  

El primer baño

Es necesario tener en cuenta que cada mascota tiene unas necesidades diferentes de acuerdo con su raza. La recomendación tanto para perros como gatos es iniciar a asearlos desde el mes y medio o dos meses de nacido. “Es importante que el primer baño esté relacionado con un momento de tranquilidad: usar agua tibia, explicarles lo que va a suceder y así crear una rutina de aseo. Este momento no debe producirles estrés ya que es posible que genere inmunodepresión, afectando su bienestar. Otra opción es acudir a una peluquería canina de confianza, puesto que, en ocasiones, se necesitan técnicas especializadas para que la mascota no desarrolle malestares a causa de este momento”, explica el experto.  

El jabón ideal

Hay una gran variedad de productos comerciales para el aseo de las mascotas que se consiguen en tiendas o almacenes de cadena. También se encuentran jabones y champús medicados, su elección dependerá de las necesidades de la mascota y la indicación del médico veterinario.

“Es clave que se asesoren de un especialista y que se realice una previa revisión con la finalidad de identificar el producto adecuado para bañar a su mascota, algunos jabones comerciales producen alergias a las pieles muy sensibles. Por otro lado, no es recomendable usar productos de aseo o de belleza para humanos porque pueden generar irritaciones en la piel”, comenta el docente lasallista. 

Además lea: Mitos y verdades sobre los medicamentos genéricos

A los gatos no les gusta el agua ¿mito o realidad?

“Esto es más mito que realidad, lo que en realidad pasa con los felinos es que normalmente no se ensucian tanto como los perros. Adicional a esto, siempre están acicalándose con su lengua, eliminando los pelos muertos, parásitos y cualquier suciedad. Por lo anterior, su baño no es tan necesario y frecuente como el de los perros, pero esto no quiere decir que a nuestros felinos no les guste el agua. Lo que sí es realidad es que para cualquier mascota puede ser muy traumática y estresante la hora del baño si no se hace de forma adecuada desde el inicio y si no se acostumbra a bañarlos de forma periódica desde temprana edad”, aclara Rivas. 

Cuidado con el pelo

La higiene y el cuidado del pelaje de los animales debe realizarse siempre de forma cuidadosa y con cierta periodicidad. Cuando un perro o un gato tiene el pelo largo se recomienda bañarlo al mes o a los dos meses. En el caso de los animales de pelo corto puede ser cada tres meses.

“Se aconseja acudir a profesionales especializados en peluquería canina dado que en muchas ocasiones se requiere cuidados y aplicarles productos especiales, todo esto depende del pelaje del perro, si es liso, rizado”, agrega el experto.  

Otras formas de limpiar

La forma correcta de bañarlos es con agua, jabón o champú para mascotas. También se pueden asear, en el caso de que todavía no sea fecha de bañarlo, con pañitos húmedos especiales para animales. “Hay prácticas comunes como diluir vinagre en agua para asearlos, con esta fórmula casera se reduce el pH y el riesgo de desarrollar una infección por hongos en la piel, pero hay que tener en cuenta que esta práctica no reemplaza el baño”, concluye Javier Rivas, médico veterinario de la Clínica Veterinaria de la Universidad de La Salle.