Letras de protesta a la violencia contra la mujer | El Nuevo Siglo
Jueves, 2 de Enero de 2014

Una de las exposiciones de arte temático más comentadas del 2013 en Europa fue "28 miradas de artistas contra la violencia", que reunió el trabajo de veintiséis creativos de diferentes partes del mundo quienes a través del arte denunciaron las formas de violencia que se ejercen contra la mujer.

 

El objetivo de los creadores era hacer evidente un tema que a veces la sociedad ignora. Al respecto Randy Rosenberg, organizadora de la exposición, dijo que: “la violencia contra las mujeres ocurre en todas partes del mundo, no es algo aislado” y por ello están presentes artistas de América, África, Asia y Europa. Es una exposición en la que se defienden los derechos humanos más básicos”.

 

Mientras el público en Europa comentaba la exposición, en Colombia desde la literatura, ladocente investigadora de la Universidad de La Salle, Amparo Novoa hacía los últimos ajustes a su libro ‘El Exilio, vocación a la transparencia y a la verdad’ que justamente habla sobre la filósofa María Zambrano, exiliada de la Guerra Civil Española, quien a partir de su experiencia personal se dedicó a la búsqueda de principios morales y conductas que fueran aplicables a los problemas cotidianos, como la violencia de género. EL NUEVO SIGLO habló con la autora.

 

EL NUEVO SIGLO: ¿Por qué dice que su obra ofrece formas de encontrar fortaleza interna?

 

AMPARO NOVOA:Es un libro rico en esperanzas, ilusiones, valores y opciones reales a partir de la vida de  una mujer que vivió las mismas experiencias duras por las que quizá están pasando miles de mujeres en el mundo y que a pesar de haber vivido en Europa, sus enseñanzas son aplicables a cientos en cualquier lugar del planeta. El texto es una guía hacia la fortaleza interior y ese poder que tienen las mujeres de transformarlo todo a su alrededor.

 

ENS: ¿Por qué escogió la vida de filósofa María Zambrano como hilo conductor de su libro?

 

AN: La vida de María Zambrano en su calidad de exiliada y su trabajo como filosofa me permitían plantear algunos elementos clave, que hacen posible una lectura renovada de la condición humana porque finalmente lo que todos tratamos es de comprender qué está pasando y por qué está pasando.

 

ENS: Han pasado 70 años desde la muerte de María Zambrano ¿Qué tanto ha cambiado la situación de violencia contra la mujer?

 

AN: Lamentablemente la situación no ha cambiado mucho. Basta recordar a algunas de las víctimas de la violencia contra la mujer en el mundo durante el 2013. Hace pocos días en México la doctora colombiana, Yamileth Marín González, de 31 años, fue atacada con ácido. En Pakistán vivimos el caso de Malala Yousafzai quien a sus doce años fue atacada por un grupo de talibanes que le disparó en repetidas ocasiones impactándole en el cráneo y cuello, por exigir su derecho a estudiar; o el de Jenny Losada quien fue asesinada junto con sus hijos y su hermana a manos de su esposo celoso en Bogotá.

 

ENS: ¿Las cifras en el mundo siguen en aumento?

 

AN: Según cifras de la Corporación Sisma Mujer, durante el 2013, cada 11 minutos una mujer fue agredida por su pareja o expareja y cada media hora una mujer fue víctima de violencia sexual en el país. Y en el mundo según Naciones Unidas hasta un 70% de las mujeres sufren violencia en su vida.

 

ENS: ¿Tengo entendido que usted apoya el Día Naranja, en qué consiste?

 

AN: La Organización de las Naciones Unidas ha proclamado el 25 de cada mes como el Día Naranja, por lo cual nos invita a todos a llevar alguna prenda de ese color para resaltar el llamamiento a erradicar la violencia contra la mujer.

 

ENS: ¿Usted habla de cuatro categorías para presentar su trabajo?

 

AN: Para explicar el tema creé cuatro categorías que son: exilio, vocación, transparencia y verdad, a partir de las cuales voy tejiendo los diversos argumentos que para usar un modo de análisis de la situación muy antropológica, pero también como dirían los filósofos muy “zambraniano”.

 

¿En ese sentido qué representa cada categoría?

 

AN: Es como un paso a paso para llegar a la fortaleza interna. El comienzo es el exilio que representa la necesidad de hacer un proceso interior que le permita apartarse de la situación y entender el origen de lo que pasó. La vocación es un camino que bien entendido hacen que de manera progresiva uno vaya encontrando la transparencia y la verdad, entendiendo nuestra condición de seres humanos y eso significa que tenemos matices.