“Poetas y Amantes”: la inspiración de Van Gogh en Londres | El Nuevo Siglo
Van Gogh es uno de los pintores postimpresionistas más populares. Es famoso por la gran vitalidad de sus obras, que se caracterizan por el uso expresivo y emotivo de colores brillantes. / Fotos National Gallery de Londres
Viernes, 4 de Octubre de 2024
Redacción Cultura

Con motivo de la celebración de los 200 años de la National Gallery de Londres, el museo ha tirado la casa por la ventana organizando una de las citas culturales ineludibles del año y, sin duda, la exposición más completa con los cuadros más importantes de Vincent va Gogh, incluyendo obras que rara ve se muestran en público (y que estarán acompañadas de algunos dibujos).

Ya no tienen que ir de peregrinación por varios museos del mundo para ver sus cuadros favoritos en vivo: estarán todos en Londres en la exposición "Van Gogh: Poetas y Amantes", que se podrá visitar hasta el 19 de enero de 2025.

Déjese sorprender por las pinturas más espectaculares de Van Gogh. Contemple las nubes arremolinadas y los cipreses meciéndose con el viento. Quédese un rato en el parque favorito de Van Gogh, el "Jardín del Poeta", o bajo la sombra de un árbol en Saint-Rémy.

En tan solo dos años en el sur de Francia, Van Gogh revolucionó su estilo con una sinfonía de color y textura poética. Se inspiró en poetas, escritores y artistas. Consideramos este período en Arles y Saint-Rémy como decisivo en su carrera. Su deseo de contar historias produjo un paisaje de imaginación poética y amor romántico a una escala ambiciosa.

Van Gogh es uno de los pintores postimpresionistas más populares, aunque no fue muy apreciado durante su vida. Actualmente es famoso por la gran vitalidad de sus obras, que se caracterizan por el uso expresivo y emotivo de colores brillantes y la aplicación enérgica de pintura empastada. Los traumas de su vida, documentados en sus cartas, han tendido a dominar y distorsionar las percepciones modernas de su arte.

Entre las obras que integran la muestra están las más conocidas, que de forma extraordinaria han salido de sus "casas" (hay préstamos del Art Institute de Chicago, del Rijksmuseum, del Museo de Orsay, del Museo van Gogh y hasta préstamos de colecciones privadas) para reunirse en la National Gallery. Entre ellas, "Noche estrellada sobre el Ródano" (1888, Museo de Orsay) y "La casa amarilla" (1888, Museo Van Gogh) —la misma en la que vivió poco menos de seis meses, pero que se ha convertido en un símbolo de su vida lejos de París—, así como cuadros que ya estaban en la galería londinense, como "Girasoles" (1888) y "La silla de Van Gogh" (1889). En cuanto a los famosos girasoles, esta es la única vez que será posible ver juntos varios cuadros de la serie que pintó en Arlés. En una carta a su hermano Theo, van Gogh esbozó un plan para exponer dos girasoles en tríptico con una versión de La Berceuse. Esta muestra ha hecho posible reunir estos tres cuadros tal y como Van Gogh soñó que se expusieran.

Es una oportunidad única para disfrutar de las pinturas y dibujos más espectaculares de van Gogh en una sola exposición. Aunque es más conocido por su atrevido uso de los colores y sus pinceladas cargadas de pigmento, los 14 dibujos que forman parte de "Poetas y Amantes" son igualmente fascinantes, muy valiosos profundizar en lo que inspiró y motivó al artista durante sus años más productivos en el sur de Francia.

Girasoles: Símbolos de felicidad

Descubra por qué los girasoles representaban la felicidad para Van Gogh. Conozca cómo experimentó con el color para captar estados de ánimo y expresar identidad.

"Los girasoles" es uno de los cuadros más populares de la National Gallery. Es el que se reproduce con más frecuencia en tarjetas, carteles, tazas, paños de cocina y artículos de papelería. También era el cuadro del que Van Gogh estaba más orgulloso.

Fue pintado durante un raro período de optimismo entusiasmado, mientras el artista esperaba la llegada de su héroe, el pintor de vanguardia Paul Gauguin.

"La silla de Van Gogh"

El cuadro de "La silla de Van Gogh", al igual que "Los girasoles", es una especie de autorretrato (también pintó la silla de Gauguin como ilustración de su temperamento contrastante).

La silla amarilla está delineada por una línea azul verdosa que refleja el color de la pared y contrasta con el rojo anaranjado apagado de las baldosas del suelo.

Van Gogh admitió libremente la artificialidad de su arte, pero sostuvo que, dado que era imposible hacer coincidir los colores de la pintura con lo que uno realmente percibía, "un pintor debería empezar mejor por los colores de su paleta que por los colores de la naturaleza".

"Cabeza de mujer campesina"

Los retratos de campesinos de Van Gogh suelen caracterizarse por una pincelada deliberadamente cruda y colores sombríos. Comparó a sus modelos con la tierra que cavaban, "algo así como el color de una patata muy polvorienta, sin pelar, por supuesto". A diferencia de las sombras negras profundas y los rasgos faciales exagerados de "Los comedores de patatas", "Cabeza de mujer campesina" tiene ligereza y la pincelada es menos tosca.

Adquirido por la National Gallery en 2013, este es el único retrato de Van Gogh en la colección y el único ejemplo de su primer periodo en Holanda, antes de mudarse a Francia. Complementa las otras cuatro pinturas de la galería, que datan de los dos últimos años de su vida, cuando vivió en Arles y Saint-Rémy, en el sur de Francia.

"Retrato de Adeline Ravoux", la hija del posadero

Adeline Ravoux, hija del posadero del Café de la Mairie de Auvers, donde Van Gogh pasó las últimas diez semanas de su vida, tenía tan solo 12 años cuando posó para este retrato de Van Gogh. Como es habitual en las últimas obras del pintor, la forma y la textura de cada una de sus pinceladas se muestran con fuerza. En este cuadro, ella emerge de un fondo denso y expresivo de pinceladas superpuestas en negro y azul.

Tras finalizar este retrato, se lo regaló a Ravoux y pintó otra versión para compartir con su hermano Theo (1890, Colección privada). Cuando Van Gogh murió, poco más de un mes después, una de estas dos versiones colgaba junto a su ataúd en la parte trasera del Café de la Mairie, junto a otros lienzos vibrantes y animados que el artista realizó durante su breve estancia en Auvers.