Dentro de las actividades que el Ministerio de Cultura y la Biblioteca Nacional han dispuesto para la celebración de los 250 años del nacimiento de Antonio Nariño, se anuncia la exposición Antonio Nariño o la aventura del pensamiento,que propone tres espacios diferentes, invita al visitante a recorrer la aventura de Antonio Nariño al descubrir la Imprenta Patriótica y dar a conocer sus ideas durante el virreinato.

Antonio Nariño fue un incansable lector y un reconocido librero en la Santafé de finales de 1700. Su afición lo llevó no solo a constituir una biblioteca muy completa para su época en la que se encontraban libros, periódicos, manuscritos, cartas geográficas e incluso instrumentos de química y física sino a propiciar un espacio de discusión, conversación y encuentro de lo más selecto de la élite intelectual del momento.

Este espacio conocido como El Santuario era un espacio privado, situado en la casa de Nariño, quien lo diseñó a inicios de 1794, fue concebido con el objeto de albergar las reuniones de su círculo literario. El recinto se encontraba proyectado con profusión de adornos significativos, inscripciones, dibujos alegóricos, plafones con retratos y un obelisco dedicado a la libertad. 

Esta exposición esta abierta al público a partir del ocho de este mes, hasta  el 28 de noviembre, y se propone recuperar las características físicas de este espacio y también su carácter como lugar para discutir, proponer y difundir ideas a través de una agenda académica que se desarrollará en el ágora de la sala recreada a partir de un plano que el mismo Nariño le encargó a Francisco Cabrer, importante ingeniero español del Reino de Nueva Granada.

Las jornadas académicas, reunirán investigadores y expertos en diferentes temas. Ellos abrirán un diálogo entre el legado de Antonio Nariño y temas actuales como la lucha por los derechos civiles, la libertad de expresión, los retos del periodismo hoy entre otros. Prográmese desde ya para participar de esta iniciativa.

Para Alexander Chaparro, historiador de la Universidad Nacional e investigador de la Biblioteca Nacional de Colombia, “el propósito de estos espacios es permitir que las personas que visitan la exposición entren en diálogo con su pasado, se apropien de su historia, la reinterpreten y podamos saber un poco más  acerca de los derroteros que nos rigen como sociedad. Todo esto nos tiene que decir algo en el contexto actual que vive el país, donde soplan vientos de paz y donde temas como la lucha por el respeto de los derechos humanos sigue estando vigente”.

Además, arte urbano en el hall central 

El legado de Antonio Nariño, en el aniversario 250 de su nacimiento, está presente además en el hall central de la Biblioteca Nacional de Colombia, con la muestra de arte urbano Ahora o nunca. Las ideas son para divulgar, a cargo de los artistas Toxicómano, Erre y Lesivo, quienes plasmaron en los murales de la Biblioteca al prócer desde sus facetas como periodista, impresor y lector; además de una reinterpretación de los 17 Derechos del hombre y del ciudadano, que tradujo Nariño en 1793.

Dos exposiciones con lenguajes diferentes, acompañadas por una programación académica, que le permitirá a los visitantes de la Biblioteca Nacional, descubrir a  uno de los más destacados pensadores de nuestra historia.