Luego del anuncio de los jugadores del fútbol colombiano de que realizarán un paro el 3 de noviembre para exigir mejores condiciones en materia salarial, laboral y de seguridad social, varios dirigentes de los equipos profesionales se han pronunciado al respecto.

Según el comunicado de la Asociación de Futbolistas Profesionales (Acolfutpro), el cese de actividades en el fútbol profesional colombiano se hará efectivo a partir de la fecha 20 de la Liga Águila y la tercera fecha de cuadrangulares finales del Torneo Águila.

Así mismo, la asociación de futbolistas indicó que no ha sido posible entablar un diálogo con la División Mayor del Fútbol Colombiano (Dimayor) y la Federación Colombiana de Fútbol para negociar el pliego de peticiones presentado por los jugadores.

La Dimayor aseguró que no tiene competencia para tocar temas con personas o agremiaciones con quienes no tiene contrato y la Federación se reunió con los representantes de los gremios, pero no se logró ningún acuerdo. El Ministerio del Trabajo ha manifestado que está dispuesto a mediar entre las partes para que se solucione la situación.

Eduardo Pimentel, presidente de Boyacá Chicó, expresó que el llamado a paro no tiene por qué afectar el normal desarrollo de la Liga. “El Boyacá Chicó declara que no aceptara presiones bajo ninguna circunstancia de estos sinvergüenzas dirigentes de Acolfutpro, que manipulan y engañan a todos los futbolistas, a la prensa, a la opinión pública y al Ministerio de Trabajo. Anunciamos sanciones y medidas disciplinarias contundentes”.

Pimentel expuso que su club profesional como empresa “y patrono de sus jugadores, con quienes tiene sus contratos profesionales al día y vigentes, no aceptará ninguna presión. Y apegados a la ley, no dudará en sancionar y terminar los contratos de trabajo a aquellos jugadores que intenten desconocerlos e incumplirlos”.

Sin embargo, Julio Avelino Comesaña, técnico del Junior, apeló al diálogo que se debe tener con los jugadores. Para él, la Dimayor no se puede dormir y dejar pasar las horas sin buscar un diálogo con los jugadores.

“Yo creo que en ninguna actividad es completo el panorama. Yo he pasado por muchos clubes. En algunos con buen respaldo y en otros que la situación es muy difícil”, dijo. Además recomendó revisar el tema para establecer cuál es la razón que asiste a los jugadores para ir a cese de actividades el próximo 3 de noviembre.