Un encarecimiento del dólar, que a su vez se reflejará en una mayor devaluación de la tasa de cambio, es uno de los efectos inmediatos que dejará a corto plazo la pérdida del grado de inversión para el país.

Así lo señala Rodrigo Cifuentes, socio de finanzas corporativas de la firma BDO en Colombia, al analizar esta situación que hoy vive la economía nacional.

El experto indica a que “un efecto inmediato, fue el aumento de la tasa de cambio, devaluando la moneda local frente al dólar. Esto se debe a la incertidumbre que sigue existiendo en el país respecto a su situación económica, política y social. Además, se prevé que se podría tener una mayor devaluación de la moneda local al tener una baja en la calificación crediticia por parte de Moody´s que hoy se encuentra en Baa2, mientras que Fitch Ratings la mantiene en BBB-, un escalón por encima del grado de inversión”.

Señala que “sabíamos que esta era una consecuencia que tendría que afrontar el país ante el retiro de la reforma tributaria y que se ha exacerbado con la situación de orden que se ve con alta preocupación en los mercados internacionales. Esperemos que esta calificación sea reconsiderada en el corto plazo y así logremos mitigar los efectos que implica para nuestra economía esta baja calificación”.

Preocupación

Actualmente las calificadoras de riesgo alertan sobre su preocupación frente a la captación de recursos permanentes para que el país cuente con capacidad financiera de solventar la deuda. Al respecto Cifuentes enfatiza que “la calificadora Fitch Ratings estima que Colombia terminará el año con un déficit fiscal cercano al 9% como porción del PIB. Adicionalmente, puede que sea el único país donde se refleja un déficit fiscal mayor en 2021, comparado con el año anterior”.

Adicionalmente como alternativa para solucionar este problema, el experto en finanzas indica que “Colombia debería contar con un plan que pueda solventar la necesidad de tener un recaudo cercano al 1,4 % del PIB”.

Refiere que si se mantiene esta situación, en el futuro inmediato se pueden presentar estos escenarios: “aumento en la prima de riesgos del país, en un corto plazo se ve reflejada en las tasas de interés más altas, lo cual afectaría directamente al país en términos económicos al tener una deuda más costosa para personas naturales y jurídicas, lo cual reduciría las opciones de financiación para el país”.

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Además, se podría presentar “el retiro de compañías internacionales que operan y generan empleo en el país, debido a que al perder su grado de inversión podría tener un efecto dominó por la falta de confianza en el desarrollo del país, con lo que se disminuiría la inversión extranjera y podría aumentar la tasa de desempleo”.

Exposición

Asimismo, habría “mayor exposición del mercado a inversionistas con posiciones más tácticas que estructurales, lo cual estima una mayor volatilidad para los TES y el tipo de cambio. Asimismo, perder el grado de inversión también aumenta el costo de financiamiento del sector privado”.

Una consecuencia inmediata es que “Bancoldex (Banco de desarrollo empresarial) había anunciado la emisión de bonos de recuperación. Sin embargo, debido a la modificación en la calificación de riesgo de la nación, aplazó la oferta pública de estos bonos, que tenían como fin la búsqueda de inversionistas para financiar la recuperación empresarial de Colombia”.

A esto agrega Cifuentes que “con un panorama a la baja, se tendría un daño potencial en el largo plazo que pueda llegar a impedir que la economía se recupere con mayor facilidad, teniendo como efecto que el PIB tenga un crecimiento más bajo de lo esperado”.

Actualmente BDO Colombia S.A.S., es una sociedad por acciones simplificada colombiana, es miembro de BDO International Limited, una compañía limitada por garantía del Reino Unido, y forma parte de la red internacional BDO de empresas independientes asociadas. Cuenta con 1.658 oficinas en 167 países y territorios en todo el mundo y el crecimiento ha sido constante en todas las regiones.

EL SOCIO socio de BDO en Colombia Rodrigo Cifuentes, dice que “el país debería contar con un plan que pueda solventar la necesidad de tener un recaudo cercano al 1,4 % del PIB”./Cortesía