Esta semana, por ejemplo, el aspirante de la Colombia Humana, Gustavo Petro, y el del movimiento Dignidad, Jorge Enrique Robledo, a la postre ambos senadores, cruzaron argumentos en torno a la política de hidrocarburos en Colombia.

“Muy errado el anuncio de Petro de que en su gobierno suspenderá la exploración petrolera en Colombia. Porque terminaríamos importando combustibles, golpearía la economía y el empleo y haría trizas las finanzas  nacionales. Y en nada se reduciría el calentamiento global”, sostuvo Robledo.

A esto replicó Petro afirmando que “el cambio climático se debe al consumo de carbón, petróleo y gas por parte de una acumulación ampliada e intensamente de capital en el mundo. Puede acabar en décadas la vida del planeta o afectarla sustancialmente incluida la vida humana que puede, también, desaparecer”.

Agregó que “la solución a la crisis climática consiste en dejar de consumir petróleo, carbón y gas, lo cual implica una escala mundial, superar por completo el capital fósil. Tal objetivo mínimamente implica superar el neoliberalismo y planificar la transición”.

“Colombia es un gran exportador de carbón y algo de petróleo y ha dependido en los últimos 35 años de esta economía extractiva, matando ramas de producción industriales y agrarias. Los TLC condenaron al país a vivir de sus ventajas comparativas: carbón, petróleo y cocaína”, agregó el candidato de la Colombia Humana.

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Tras indicar que “…. lo que proponemos es priorizar las reservas descubiertas para consumo interno mientras dura la transición. La transición significa que la demanda interna por fósiles debe disminuir, mientras se reemplaza la matriz energética, de movilidad y avanza la economía descarbonizada”, Petro sostuvo que “… Robledo nos propone un debate que creo se debe dar. Implica la concepción de lo que significa el cambio climático y el cambio tecnológico hacia la descarbonización de la economía y por tanto el surgimiento de nuevas relaciones sociales de producción”.

“De acuerdo Petro, hagamos un debate sobre qué hacer en Colombia con el calentamiento global y la transición energética. Porque si ese grave problema no se trata o se trata mal puede ser muy dañino para Colombia.

Nos ponemos de acuerdo en cómo y dónde adelantarlo”, sostuvo, a su turno, Robledo.

Precisó que “la propuesta de Petro lleva a que en 6,3 años Colombia pierda su autosuficiencia petrolera, luego no tendrá petróleo para exportar y deberá importar cada vez más combustibles para sus automotores y demás necesidades”.

“La errada idea de Petro ataca el futuro de estas cifras (2019): 40% de las exportaciones, bastante de $23,5 billones de ingresos del Estado, inversiones en exploración y producción por US$4.030 millones y muchos de un total de 65.000 empleos en el sector petrolero”.