Después de la pandemia a nivel mundial se vio un alza en la compra de bienes raíces como una opción de inversión, especialmente en la categoría de rentas cortas y vacacionales. Y es que para propietarios de todo el mundo esto no solo significó aumentar su patrimonio, sino también tener una opción de generar ingresos extras.
Un informe realizado por AirDNA, especializada en datos y análisis para la industria de alquiler a corto plazo, el número de anuncios de alquiler a corto plazo disponibles en Estados Unidos se disparó a 1,38 millones per las tasas de ocupación cayeron en 31 de los 50 principales mercados entre julio y septiembre.
Algo similar ocurre en algunas ciudades del mercado colombiano, en donde cada vez se pueden encontrar más alternativas de hospedaje y experiencias, pero también es cierto que es mucho más difícil mantener niveles de ocupación similares frente al crecimiento de la oferta disponible. Así lo resalta Xavier Cárdenas Becerra, CEO de Wellcome, la plataforma de administración de rentas vacacionales, que desde hace algunos años se dio a la tarea de profesionalizar esta industria en Latinoamérica.
“En medio de este contexto están ocurriendo varias cosas y la primera que debo señalar, es que hay una mayor oferta, por lo que si bien, es un mercado que cada vez está más al alza, es mucho más competitivo. Lo que me lleva a dar mi segundo análisis, y es que el nivel de exigencia de los huéspedes aumentó, por lo que se requieren más dedicación, tiempo, tecnología y más conocimiento del sector, de sus tendencias, entre otras cosas, para satisfacer las necesidades actuales de los viajeros y, por último, algo que está correlacionado es que el estar en una plataforma es solo la punta de iceberg de toda una operación que hay detrás”, sostiene Cárdenas, quien agrega que la mejor analogía para entender el tema es con las redes sociales, en donde cualquiera las puede tener, pero solo pocos logran diferenciarse con un contenido de valor.