Ofrecer crédito de fácil acceso y a tasas bajas es una de las estrategias principales para fortalecer la rentabilidad y productividad agropecuarias.

De allí que resulte positivo que para este año la Comisión Nacional de Crédito Agropecuario autorizara la creación de una línea de préstamos que tiene como primer objetivo la transformación productiva del campo.

De igual manera, según el ministerio del ramo, se activó el Plan Indicativo de Crédito 2024, con el cual se estima la asignación de créditos de fomento para el campo entre $25 y $26 billones.

La Comisión estableció que los campesinos y campesinas serán priorizados en las operaciones crediticias. Por eso, se proyecta disponer entre $4,8 billones y $5,5 billones para pequeños productores y pequeños productores de ingresos bajos.

Estos recursos, administrados por Finagro, estarán acompañados de Líneas Especiales de Crédito con tasa de interés subsidiada.

De acuerdo con la entidad, esta nueva línea de crédito será para la transformación productiva y sostenible, por lo que se fijó una tasa de interés de IBR + 6% para pequeños productores y pequeños productores de ingresos bajos.

De otro lado, también habrá nuevos recursos para el Incentivo a la Capitalización Rural (ICR), un mecanismo mediante el cual se otorga un beneficio a los campesinas, campesinos y productores para disminuir los saldos de sus créditos. Así las cosas, a un pequeño productor de ingresos bajos se le reconocerá el incentivo hasta con el 40% del valor de la inversión del proyecto; un pequeño productor hasta el 30% y el mediano hasta el 25%.