La puesta en operación de cajeros automáticos que dispensan criptomonedas prendió las alarmas de las autoridades financieras del país que indicaron que este tipo de dinero no es aprobado por el Estado colombiano.
El superintendente Financiero, Jorge Castaño, alertó sobre los riesgos de perder la inversión realizada al comprar criptomonedas, con motivo de la instalación de cajeros automáticos en Pereira, Risaralda; señalando a su vez que estos dispositivos no tienen la aprobación de las autoridades, según reportaron medios locales.
“Cuando aparecen esas operaciones hay dos mensajes que enviar. Ya sea con cajeros o por Internet, los riesgos siguen siendo los mismos. Los que se arriesguen a hacer inversiones en estos productos están expuestos a perder su dinero y no hay una garantía ni estatal ni privada. Son activos digitales que ni siquiera están ubicados en Colombia, así que el llamado es a que evalúen muy bien los riesgos de estas inversiones”, señaló el funcionario.
No son vigiladas
El Superintendente afirmó que los cajeros de bitcoin y otras criptomonedas no son vigiladas por los organismos concernientes ni forman parte del sistema financiero colombiano.
Castaño consideró que gracias al anonimato de la contraparte que presta el servicio, es posible que el dinero se pierda.
Esta afirmación va en la misma dirección, lo que el Superintendente expresó hace unas semanas con respecto a que las criptomonedas no cuentan con respaldo estatal ni privado en el país, por tanto, las denuncias por estafas no pueden ser apoyadas desde el marco jurídico y legal; citando puntualmente un caso en el que un juez falló a favor del Estado al considerar que las víctimas de una estafa financiera hicieron inversiones bajo su propio riesgo en un área no regulada por el Gobierno.
Además aseguró que gracias al carácter ilegal de los criptoactivos, las entidades financieras del país no pueden comerciar con ellos, aunque sí aclara que para el público general sí se permite, así como la compra de bonos, oro y otros activos.
Estas declaraciones fueron realizadas en el foro Profundización del mercado de capitales en Colombia, organizado por la Asociación Nacional de Instituciones Financieras, ANIF, con la participación del Banco de Desarrollo de América Latina, CAF, y la Bolsa de Valores de Colombia, BVC.
El Superintendente Financiero anunció que la ANIF está en conversaciones de aliarse con el consorcio R3 para optimizar por medio de la asesoría provista el mercado de valores local, destacando que la Oficina de Contraloría Monetaria de Estados Unidos, un buró federal independiente, ya incorporado blockchain a sus procesos, al igual que la Reserva Federal.
“Lo que estamos haciendo con esto, es entender cómo podemos fomentar, desde la regulación y supervisión, un entorno favorable para que las nuevas tecnologías se desarrollen y entreguen los beneficios que requiere a nuestro sistema financiero”, culminó.
Ya ha habido problemas
Pero la advertencia de la entidad de vigilancia no es nueva. Desde hace varios años la Superfinanciera dijo que el bitcoins y las otras criptomonedas no estaban autorizadas para realizar transacciones comerciales en el país.
Me Coin fue una de las primeras empresas que negocian con monedas virtuales que se vio involucrada en una estafa por US$300 millones que se descubrió en Medellín cuando varios de sus 150 mil clientes denunciaron irregularidades.
Valiéndose una vez más del anonimato de las redes sociales, esta organización engañó a los incautos con falsas rentabilidades de hasta el 50% por la inversión realizada en criptomonedas.
Los usuarios afectados por este portal, cuyo dominio dejó de estar en funcionamiento, invirtieron entre $400 mil y $100 millones con el firme propósito de ver duplicada su inversión.
Las investigaciones de las autoridades siguen con el fin de controlar el auge que está alcanzando el bitcoin en Colombia.