Luz verde al contrato para la semaforización inteligente | El Nuevo Siglo
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Lunes, 3 de Septiembre de 2018
Redacción Nacional

Después de seis meses de retrasos, se firmó el acta de inicio del contrato para la implementación del Sistema de Semaforización Inteligente de Bogotá, por parte de la Secretaría Distrital de Movilidad y el Consorcio Movilidad Futura 2050 (conformado por Siemens S.A. y Sutec Sucursal Colombia), se puso en marcha la ejecución de un sistema ágil y moderno que traerá beneficios a la seguridad vial de los bogotanos.

La Procuraduría General de la Nación, mediante comunicación remitida a la Secretaría Distrital de Movilidad, manifestó que lo más viable era dar inicio al contrato para la implementación del Sistema Semafórico Inteligente, toda vez que no se detectaron vicios de ilegalidad en el desarrollo de la actividad contractual.

“Acatando la recomendación de la Procuraduría General de la Nación, se había suspendido el inicio de la ejecución del contrato. La Secretaría Distrital de Movilidad realizó diversas gestiones ante las autoridades competentes relacionadas con la denuncia sobre la presunta falsedad de documentos y abrió un sancionatorio al Consorcio, en el que recogió información sobre estos aspectos. Estas actuaciones fueron presentadas a la Procuraduría General de la Nación, que nos ha manifestado la viabilidad para reiniciar este proyecto”, dijo el Secretario de Movilidad.

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Inversión

En este proceso se invertirán 235.000 millones de pesos aprobados por el Concejo de Bogotá, a través de vigencias futuras, para hacer realidad esta trasformación en los semáforos de la ciudad.

Se contará con una gran central automatizada para la operación que estará asociada al Centro de Gestión de Tránsito de la ciudad.

El secretario de Movilidad destacó tres ventajas de este nuevo sistema: una será la fiabilidad, ya que nunca dejarán de funcionar como pasa en este momento cuando se presenta un corte de luz: “Todos nuestros semáforos van a tener una batería que les permitirá operar un par de horas adicionales así haya una falla en el suministro de energía”.

La segunda es la información que se les brindará a los peatones. Gracias a este nuevo sistema los ciudadanos podrán saber el tiempo en el que podrán cruzar las calles.

“Lo tercero es que nuestros semáforos ya no están ciegos y sordos, van a tener información en tiempo real y a partir de eso van a tomar las mejores decisiones para que los bogotanos nos movamos más rápido”, informó Bocarejo.

El 80% del presupuesto estará dedicado al contrato del sistema de semáforos inteligentes, el 10% al contrato del sistema de comunicaciones como servicio y el otro 10% a contratar las actividades de interventoría.

El proceso incluye el suministro, instalación, programación y operación inicial de una red que reemplazará la que se encuentra en las 1.384 intersecciones actuales y se instalarán 60 adicionales.

Con la nueva red semafórica, Bogotá estará a la vanguardia de las principales ciudades del mundo que implementan sistemas de movilidad inteligente como Barcelona, Madrid, Berlín, Londres, Nueva York y Sao Paulo, entre otras.

Los beneficios del nuevo sistema de semaforización inteligente serán considerables. Ciudades como Sao Paulo y Nueva Delhi han logrado ahorros en tiempos de viaje de entre 15 y 25% en los tiempos promedio de viaje de sus ciudadanos con proyectos de actualización parcial de su sistema de semáforos.

 

La red

Con una red inteligente, la información para peatones mejorará en vía, ya que les permitirá predecir con certeza el tiempo de cruce con contadores regresivos, mejorando la seguridad vial y reduciendo el riesgo de siniestralidad.

“Queremos dar una información detallada cuando van a cruzar, le permite calcular el tiempo que tiene para cruzar. Además los semáforos para personas con discapacidad que todos tengan elementos sonoros y láminas para que puedan tener la información necesaria”, aseguró Bocarejo.

El sistema actual de semáforos presenta un gran atraso, es semiautomática, esto genera limitaciones en la operación y en el control de la red, las cuales terminan afectando el tiempo de viaje de los bogotanos.