Por no tomar medidas eficientes frente a la crisis de la salud, el procurador general Fernando Carrillo le llamo la atención a la gobernadora encargada de San Andrés, Sandra Victoria Howard.
Carrillo le dijo a Howard, quien es viceministra de Turismo y asumió como luego de que la propia Procuraduría suspendiera al titular Ronald Housni durante diez meses, que dirigir los destinos de San Andrés “es asumir tiempo completo con la isla -no es un oficio de medio tiempo- y quiero llamar la atención en ese tema: la grave crisis de salud continúa. No se han tomado las medidas necesarias”.
Sostuvo el jefe del Ministerio Público que “no se han tomado determinaciones y por eso vamos a conminar a las autoridades para que planteen un programa de trabajo que implique el mejoramiento de la prestación del servicio de la salud en San Andrés”.
La Procuraduría, como parte de una acción preventiva, encontró que el Hospital Clarence Lynd Newball Memorial presenta un deficiente tratamiento, almacenamiento, transporte y disposición final de residuos peligrosos, que permanecen acumulados en la parte posterior del edificio, a la intemperie, sin ningún tipo de protección ni aislamiento, violando los principios de bioseguridad, gestión integral, precaución, prevención y comunicación del riesgo.
Según el Gobierno departamental, Howard acogió las recomendaciones de la Procuraduría y se comprometió a presentar una respuesta efectiva para dar solución a la crisis sanitaria y ambiental que vive el archipiélago.
Así quedó acordado al término de una mesa técnica convocada por la Procuraduría, en la que también participaron los ministerios de Salud y Ambiente, junto con la Superintendencia Nacional de Salud.
La gobernadora Howard deberá entregar una respuesta frente a la contratación de un operador de salud que garantice la prestación de los servicios en el archipiélago, certificando su idoneidad para asumir la atención integral de los sanandresanos.
Al Ministerio Público le preocupa la situación a la que están siendo expuestos los habitantes y visitantes de la isla, en riesgo de enfrentar epidemias o pandemias por la exposición a los residuos hospitalarios (anatomopatológicos y agentes patógenos) que se generan de la prestación de los servicios de salud y actividades complementarias.
En respuesta, la Administración departamental y el Ministerio de Ambiente expusieron los avances en la protección del ecosistema del archipiélago, con las que se busca dar respuesta a las alertas lanzadas desde el ente de control, especialmente en lo que tiene que ver con la protección de los acuíferos, las medidas de seguridad para el relleno sanitario y el depósito final de los desechos anatomopatológicos del hospital.
En todo caso, para la Procuraduría es urgente la puesta en marcha de acciones encaminadas a cumplir con la política de gestión integral para el manejo de los residuos hospitalarios, que incluyan medidas operativas, financieras y administrativas para el seguimiento del almacenamiento, monitoreo y disposición final de ese tipo de sustancias infecciosas y peligrosas.
Entre tanto, la directora administrativa de la IPS Universitaria de Antioquia, Martha Cecilia Castrillón, dio un parte de tranquilidad a la ciudadanía de las islas al indicar que "la operación del hospital en estos momentos va en un 95 por ciento. Se han presentado algunos retrasos en insumos pero es debido al transporte aéreo. Se espera que, en los próximos días, colocar al día el pago de los empleados y brindar a los usuarios la mejor atención posible para suplir sus necesidades".