Los países ricos tienen una "deuda moral" anual de 500.000 millones de dólares con los países empobrecidos, aseguró la premio Nobel de Economía francesa Esther Duflo, que propone que esas naciones asuman su responsabilidad en el cambio climático a través de dos tasas. "Es lo que yo llamo una deuda moral. No es lo que costaría adaptarse, no es lo que costaría atenuar (el cambio climático). Es lo que debemos", declaró al Financial Times, basándose en los efectos del cambio climático en la mortalidad de los países pobres. Para sufragar esta crisis, propone dos mecanismos: aumentar el tipo impositivo mínimo de las multinacionales y gravar a las grandes fortunas.