Aunque el viernes pasado las duras críticas que lanzó el expresidente César Gaviria a la resolución adoptada por la Sesión Especial de la ONU sobre el tema antidrogas, fueron interpretadas por algunos analistas y comentaristas periodísticos como una crítica vedada del exmandatario al presidente Santos, teniendo como telón de fondo una presunta inconformidad de los liberales por la no inclusión en la terna para Fiscalía General del actual vicefiscal Jorge Fernando Perdomo, lo cierto es que no hubo tal. No solo Gaviria hizo referencia en muy buenos términos al discurso de Santos ante el pleno de la ONU pidiendo un nuevo enfoque antidrogas, bajo la tesis de que la guerra contra el narcotráfico no se está ganando, sino que el expresidente fue hace varios años el primero en pedir un viraje en las políticas antidrogas, junto a exmandatarios latinoamericanos. 

 

Dos, aunque…

 

Un senador conservador consultado por un periodista de EL NUEVO SIGLO el sábado pasado en torno a si su colectividad esperaba que en el remezón ministerial les pudieran dar un nuevo cupo en el gabinete, respondió que no lo veía posible y que mucho tuvo que maniobrarse para que no le quitarán al partido el Ministerio de Minas y Energía, pues ya La U y los liberales habían pedido que les dieran esa cartera. “… Si fuera por la forma en que se apoyan los proyectos y la disciplina de votación en las comisiones y las plenarias, e incluso por el tono férreo de defensa del proceso de paz, el conservatismo sí merecería una mejor representación ministerial, pero sabemos que no hay margen de acción para ello en estos momentos”, precisó el congresista en charla off the record.

 

¿Y las agencias?

 

Y hablando de ajustes en el gabinete, una alta fuente gubernamental le dijo a varios periodistas con quienes habló informalmente sobre el tema, que los gabinetólogos “estaban arcaicos” pues solo basaban sus análisis en cuántos ministerios habían y a qué partido le tocaban más o menos. Sin embargo, el alto funcionario indicó que la estructura del Estado ha cambiado sustancialmente y ahora, por ejemplo, es necesario contabilizar también cómo están distribuidas las agencias estatales, que se han convertido poco a poco, por autonomía y músculo presupuestal, en cargos más poderosos incluso que las carteras ministeriales, por su alta capacidad de ejecución. Vea pues.

 

Optimismo, pero… 

 

Esta semana debe activarse de nuevo la Mesa de Negociación en La Habana y las expectativas apuntan a que este ciclo debe llevar a un acuerdo definitivo sobre temas como el cese el fuego y de hostilidades, así como el mecanismo de desarme de la guerrilla. Los pronunciamientos de ambas partes dan para ser optimistas al respecto, e incluso en fuentes cercanas a la subversión se dice que sus voceros han admitido que está muy “cocinado” el acuerdo sobre esos dos asuntos, aunque en el tema de las “zonas de ubicación” todavía persisten contradicciones de forma y fondo.