Un parlamentario de Cambio Radical le dijo a un periodista de EL NUEVO SIGLO que los liberales y La U parecía que andaban “un poco molestos” porque el presidente Santos le dijo la semana pasada al nuevo ministro de Transporte, Jorge Eduardo Rojas, que tenía que consultar al vicepresidente Germán Vargas Lleras en todo lo relacionado a temas de infraestructura. “… No entiendo la sorpresa ni la molestia, el Vicepresidente maneja toda la política de infraestructura que es la que, al fin de cuentas, está soportando buena parte de la calificación positiva del Gobierno, mientras que los ministerios y las políticas que manejan otros partidos con cupo en el gabinete, se rajan ostensiblemente en las encuestas y las evaluaciones gremiales… Eso es lo que les debía preocupar a esos partidos”, precisó el parlamentario.

Realidades rojas

Una alta fuente del liberalismo dijo no entender por qué se hablaba todavía de “corrientes políticas” al interior de ese partido, cuando “lo que estaba demostrado” es que en ese partido “ha cambiado” mucho en la última década. Sostuvo que hablar de “gavirismo”, “samperismo”, “serpismo” y otros “ismos” es un “poco arcaico”, ya que muchos de los dirigentes que crecieron bajo esos “bloques” ya hoy tienen “vuelo propio” e incluso terminan compitiendo con los “delfines” de quienes fueran años atrás sus páter políticos. Recalcó que hay urgencia de algunos corrillos políticos y periodísticos por “madurar a punta de prensa a algunos perfiles, como si fueran plátanos”.  Vea pues.

Distensión, pero…

Las relaciones entre el alcalde Enrique Peñalosa y la bancada de Representantes a la Cámara por Bogotá han estado marcadas por la tensión, al punto que no sólo se trenzaron hace dos semanas en una aguda polémica con fuertes críticas de lado y lado, sino que incluso un parlamentario radicó esta semana un proyecto de ley para obligar a que los mandatarios capitalinos tengan que asistir obligatoriamente a las citaciones y debates en el Congreso. Ayer se reunieron Peñalosa y varios de los congresistas bogotanos para tratar de limar asperezas, y aunque el encuentro sirvió para distensionar, e incluso se adelantó una agenda bilateral, aún quedan prevenciones de lado y lado, dijo uno de los asistentes.

Intereses del Emisor

El Banco de la República tiene a varios sectores y gremios con los “pelos de punta”, ante los rumores que empiezan a circular en torno a que en la reunión de la junta directiva en la última semana de este mes seguiría por la misma línea de subir sus tasas de interés de referencia, con el objetivo de frenar la escalada inflacionaria. Un dirigente gremial le dijo a un periodista de este Diario que si bien el costo de vida pareció empezar a ceder en abril, según lo reportó el Dane la semana pasada, todavía es muy pronto para “asegurar” que viene la destorcida inflacionaria, por lo que el Emisor, a lo sumo, podría optar por dejar quietas las tasas, en espera de ver el indicador del IPC en mayo y junio.