Temor rojo | El Nuevo Siglo
Sábado, 7 de Diciembre de 2013

En las toldas del Partido Liberal empiezan a escucharse voces que llaman a  no confiarse, pues hay candidatos al Congreso haciendo cuentas alegres. “… Aquí hay gente creyendo que los liberales van a aumentar las curules de forma sustancial y que eso ya está seguro… Están creyendo en las encuestas que nos dan como favoritos… No nos podemos confiar, esto es trabajando día a día por los votos, la campaña para Senado y Cámara apenas empiece y serán enero y febrero los meses más definitivos para saber quién llega y quién no”, precisó un alto dirigente liberal en diálogo informal con un periodista de EL NUEVO SIGLO.

 

Votos más que nombres

 

Entre los mockistas hay quienes consideran que el exalcalde y excandidato presidencial no debería hacer lo mismo que hizo el expresidente Uribe al confeccionar su lista al Senado. Como se sabe, el exmandatario optó por escoger para los primeros 20 puestos de su lista a personas que considera fieles a su ideología, así ello implicara que su potencial electoral es muy bajo e incluso no tienen antecedente alguno en las urnas. Se sabe que Mockus, que encabezará la lista de la ASI al Senado les ha ofrecido puestos en la lista a algunas personas que si bien tienen alguna figuración y méritos en otros campos, no tienen experiencia en lo político y lo electoral.

 

Agenda económica

 

Los gremios de la producción consideran que en la reciente gira del presidente Santos por Estados Unidos faltó una delegación comercial del sector privado más numerosa, pues es claro que si bien hubo una agenda política, al entrar en la profundidad de las relaciones el tema económico termina primando. Confían en que el nuevo embajador, Luis Carlos Villegas, esté concretando para enero y febrero las primeras reuniones de alto nivel en Washington para hablar con las autoridades económicas y el sector privado de ese país sobre los ajustes al TLC.

 

Interrogantes a candidatos

 

De otro lado, se sabe que varios líderes gremiales están considerando que se redacte una especie de documento-cuestionario en el que se planteen una serie de interrogantes alrededor de lo que debe ser el futuro de la economía. La idea es que ese documento se envíe a los distintos candidatos presidenciales y que éstos los contesten de manera puntual y detallada. Luego se haría un análisis interno, del cual debería salir una propuesta unificada de los gremios sobre lo que tendría que hacerse en materia económica después de agosto de 2014.

 

Por puertas

 

En el Congreso hay molestia de varios senadores y representantes que consideran que al final de este primer tramo de la legislatura el espacio para los debates de control político se redujo de manera sustancial, dejando en el tintero más de una discusión a la que se le había trabajado con profundidad y ya es obvio que esa información pierde vigencia e impacto mediático para el próximo año. También es claro que el anuncio de una citación a sesiones extras se hizo para asustar a más de un parlamentario ausentista.