¿Sabe cuántas vacunas contempla el esquema de inmunización en el país? ¿Usted, sus hijos y familia se las han colocado todas? ¿Hasta cuándo se puede poner al día? ¿Cómo influyen para un envejecimiento saludable?

Dilucidar todos estos interrogantes a la población general es el objetivo de la 21 ava. Semana de Vacunación de las Américas y la 12ava. Semana Mundial de la Inmunización que se conmemora desde este lunes y hasta el sábado.

Con los avances científicos que se han desarrollado en los últimos años se ha hecho evidente que las vacunas salvan vidas. Al respecto, la Organización Panamericana de la Salud estimaba que de cumplirse con los objetivos de cobertura para la introducción y/o la utilización continua de únicamente 10 vacunas, se podrían evitar de 24 a 26 millones de futuras muertes en 94 países de bajos o medio-bajos recursos en el decenio de 2011-2020.

Bajo este panorama, se busca generar conciencia sobre la importancia de las vacunas y la necesidad de actuar de forma colectiva para el control de enfermedades.

Es relevante resaltar que en Colombia opera el Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI), definido por la OMS Y OPS como el resultado del esfuerzo conjunto de diferentes organismos, que busca lograr una cobertura universal de vacunación, con el fin de disminuir la morbilidad y la mortalidad causadas por enfermedades prevenibles con inmunización.

A pesar de que existen retos en la región como lo señala el reciente informe de Unicef, la adherencia de Colombia en el PAI es positiva y el país afortunadamente tiene una gran fortaleza en cuanto a la administración de vacunas para las diferentes poblaciones” comentó Juan David Escobar, presidente de Seguros Sura.

En Colombia, el esquema contempla 21 vacunas que protegen contra 26 enfermedades, las cuales son aplicadas de manera gratuita a las diferentes poblaciones residentes en todo el territorio nacional, discriminadas en: niños y niñas de cero a cinco años, niñas a partir de los 9 años, mujeres en edad fértil (MEF) de 10 a 49 años, gestantes, población susceptible para fiebre amarilla residente o viajera de 1 a 59 años y población adulta de 60 y más años.

“Cada vacuna representa una oportunidad de salvar una vida y es por ello que, desde VaxThera, contribuimos no solo a la investigación, desarrollo y producción de vacunas, sino también a la visibilización de los esquemas indicados para las diferentes etapas de desarrollo, y a la administración de las dosis”, puntualizó, por su parte, Jorge Emilio Osorio, presidente de VaxThera.

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Nunca es tarde

En las últimas décadas, la inmunización logró erradicar en América Latina enfermedades como rubéola y viruela y, año tras año, se ha demostrado que es una estrategia que ayuda a prevenir epidemias y contagios de alto impacto para la salud pública.

Sin embargo, la cobertura contra enfermedades prevenibles diferentes al covid disminuyó notablemente durante la pandemia y se estima que en 2022, el número de niños menores de un año con esquemas de vacunación completo fue el más bajo de los últimos 12 años. Además, sólo en 2020, 30 millones de niños dejaron de recibir su vacuna contra la Difteria, el Tétanos y la Tosferina, y la cobertura global de vacunación bajó de 86% a 83%.

En cuanto a las personas mayores, estas representan el 13,9% de la población y un 26,6% del total de las vacunas aplicadas en el país. En los adultos de 80 años en adelante se concentra una mayor cobertura frente a los adultos más jóvenes.

 “Sabemos que vacunarse no solo protege la salud individual de una persona, independientemente de la edad que tenga, también contribuye a preservar el bienestar de toda la sociedad. Cada persona vacunada crea un ‘muro de inmunidad’ que corta la propagación de virus y bacterias”, aseguró Gunnar Riediger, General Manager de GSK Colombia.

En este contexto es vital ponerse al día con los esquemas de vacunación y recordar que el mismo disminuye la mortalidad infantil ya que protege a los niños de enfermedades potencialmente mortales como la Meningitis y la Tosferina, una condición que, en los bebés, puede causar apnea, neumonía, colapso pulmonar (conocido como neumotórax), hipertensión pulmonar grave, convulsiones, o encefalopatía.

De igual forma promueve el envejecimiento saludable ya que a medida que una persona entra en años el sistema inmunológico se debilita, haciéndola más susceptible a enfermedades y complicaciones graves. Por ello, aplicar las vacunas recomendadas oportunamente es una de las mejores formas de proteger a las personas mayores contra Influenza, Tos Ferina, meningococo, covid-19, entre otras, y así evitar complicaciones a largo plazo, hospitalizaciones e incluso la muerte.

En cuanto a los pacientes con enfermedades crónicas, que son más vulnerables a padecer condiciones inmunoprevenibles de mayor gravedad, la vacunación se convierte en una estrategia complementaria de tratamiento.