El Distrito Regional de Manejo Integrado (DRMI), “Selva Pluvial Central Siete Sabias - Esperanza de Vida”, fue inaugurado de manera oficial por la Corporación Autónoma Regional del Chocó (Codechocó), para la protección de los servicios ecosistémicos de la zona, especies emblemáticas en peligro de extinción y la riqueza hídrica que abastece a cerca de 150 mil habitantes de Quibdó.
El DRMI del Chocó, “Selva Pluvial Central Siete Sabias - Esperanza de Vida”, se ubica en territorio colectivo de las comunidades afrodescendientes de los municipios de Quibdó y Atrato, cuenta con una extensión de 30.398 hectáreas, comprendidas en siete corregimientos: Pacurita, Guadalupe, Tutunendo, San Francisco de Ichó, La Troje, San Martin de Purré y San José de Purré, los cuales albergan una gran riqueza en fauna y flora, donde se registran 90 especies de plantas, 479 especies de fauna silvestre (210 de aves, 117 mamíferos, 44 anfibios, 75 reptiles y 33 peces), entre otros.
Esta zona hace parte de la selva Pluvial Central localizada en el valle del río Atrato, donde se concentra la mayor pluviosidad del andén Pacífico colombiano y donde las formaciones selváticas se encuentran entre las más ricas del mundo.
En el DRMI se permitirán actividades productivas sostenibles, extractivas controladas y reguladas de aprovechamiento forestal, pesca, minería de subsistencia, agroindustrias; de conocimiento, acciones de investigación y de educación ambiental; de recreación, ecoturismo y etnoturismo, entre otras. Todo ello regulado a través del plan de manejo concertado entre los actores, a fin de garantizar la compatibilidad de estas actividades humanas con los objetivos de conservación.
“El proceso para la declaratoria de Siete Sabias, inició en el año 2021 mediante diálogos con las comunidades a través del Consejo Comunitario Mayor de la Asociación Campesina Integral del Atrato Cocomacia; y hoy nos llena de orgullo presentar este DRMI, el cual aportará a la sostenibilidad ambiental, social, cultural y económica de la zona, soportado en los ecosistemas y las actividades productivas que se llevan a cabo en los 7 corregimientos que comprenden el área con el fin de mantener el desarrollo económico y especialmente la seguridad alimentaria de las comunidades que viven y subsisten en el territorio colectivo de Cocomacia”, señaló Arnold Alexander Rincón López, director general de Codechocó.
Además extendió un mensaje de agradecimiento al compromiso de Cocomacia, el Instituto Humboldt, Re:wild y Andes Amazon Fund, el programa de Tierra Dora de USAID Colombia y Conservación Internacional, quienes han estado presente en el proceso de la declaratoria del área protegida y harán parte de las iniciativas a desarrollar en marco de la implementación del plan de manejo de esta figura de conservación.
Por su parte, Yonny Moreno Cuesta, vicepresidente del Consejo Comunitario de Cocomacia, durante la inauguración, agregó que las comunidades se sienten complacidas con el reconocimiento que, se le hace a nivel regional y nacional a los siete corregimientos que integran en área protegida, los cuales cuentan con pasivos ambientales de gran importancia. Además, agregó que tras la declaratoria; las comunidades iniciarán el proceso de transición en el desarrollo de las actividades productivas como la agricultura y la minería, las cuales deben contar con procesos de sostenibilidad.
“El Chocó y la selva central pluvial cuenta con servicios ambientales invaluables; y el DRMI Siete Sabias, permite avanzar en la protección de recursos como el agua, la cual tiene un valor muy importante en el marco de la declaratoria; ya que el recurso hídrico de esta zona abastece a los habitantes del municipio de Quibdó, por lo cual, seguiremos realizando aportes desde la cooperación internacional para que, la protección de los recursos naturales y el desarrollo de las comunidades sea posible”, argumentó Fabio Arjona, director de Conservación Internacional Colombia.
Inauguración
Durante la inauguración del DRMI Selva Pluvial Central Siete Sabias - Esperanza de Vida, que se llevó a cabo en el corregimiento de Tutunendo se realizó la liberación de tres ejemplares de fauna silvestre, una Tortuga (Rinoclemmys melanosterna) una Zarigueya (Didelphis marsupialis) y una Boa Arcoíris (Epicrates maurus), las cuales fueron entregadas de manera voluntaria por las comunidades para su liberación en su hábitat natural.
Además, con el apoyo del Instituto Humboldt y Conservación Internacional Colombia, se instaló la primera cámara trampa del área protegida, en marco de la Red nacional de cámaras trampa ‘OTUS’, herramienta que permitirá fortalecer los procesos de monitoreo de la biodiversidad de la zona.