El músico colombiano Juan Esteban Aristizábal, o Juanes, como mejor se le conoce, recuerda con claridad aquellas noches de infancia, de vacaciones en la casa de su familia en Carolina del Príncipe, una zona agrícola al norte de Medellín, Antioquia, donde “espiaba” a los adultos en el sótano que servía como cantina, a donde llegaban las personas a tocar, bailar y escuchar música popular.

Esa música que salía de una tradicional ‘vitrola’, o máquina que colocaba vinilos de diversos artistas al azar, no solo le servía como arrullo para dormir, también se convertiría en la semilla para que años después su ecléctica pasión musical se plasmara en su más reciente producción discográfica, Origen, 12 canciones de algunos de sus ídolos reimaginadas por Juanes a través de diversos géneros y fusiones.

A esos recuerdos regresa Juanes, con adaptaciones de Volver, de Carlos Gardel; Nuestro juramento, del ecuatoriano Julio Jaramillo o No tengo dinero, del mexicano Juan Gabriel, que exponen a un inquieto melómano.

En diálogo con la Agencia Anadolu desde Miami, el reconocido artista habló sobre las etapas en que dividió Origen y el momento en que se encuentra su carrera.

“A gritos me pedía el alma hacer este proyecto”, cuenta el artista. “Además de una necesidad: es madurar hacia la infancia. Ahí está el punto, poder recordar cada momento especial de mi vida, cómo las canciones de la infancia, de la adolescencia, de la etapa más adulta tuvieron que influenciar mi carrera y por qué me dedico a esto”, explica.

La producción comenzó a finales del 2019 y las grabaciones en enero de 2020 en su estudio del sur de la Florida. Además de los temas mencionados, incluye versiones de Could You be loved de Bob Marley; Rebelión de Joe Arroyo; Dancing in the dark de Bruce Springsteen, Sin medir distancias de Diomedes Diaz; Todo hombre es una historia de Kraken; El amor después del amor de Fito Páez; La bilirrubina de Juan Luis Guerra; Y nos dieron las diez de Joaquín Sabina.

Tal vez no haya mejor definición para Origen que las mencionadas en el documental que se lanza a la par del disco, donde el colombiano invitó a algunos de sus ídolos a escuchar las versiones tributo de sus obras.

Juventud rockera

La idea del disco empezó a germinar cuando soñaba con una carrera musical, con solo 15 años, cuando buscaba convertirse en un músico “rockero” en Medellín. Escuchaba a su banda favorita, Metallica, con su disco de covers Garage Inc, en donde interpretaban versiones de artistas que a ellos los habían influenciado.

La producción evoca esos recuerdos de juventud, de la misma forma que se cuelan en la memoria las imágenes y sonidos que salían del suelo de su habitación en Carolina del Príncipe, donde podía ver a las personas deleitarse con la música de artistas tradicionales de los 60, 70, 80.

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Sin embargo, esos ‘remake’ no son tradicionales, aclara el músico. Reimaginó su música favorita. Buscaba que cada canción se convirtiera en propia, “encontrando un nuevo significado”.

Afirma que la falta de creatividad no lo llevó a Origen: “siempre va variando como en los escritores, como los artistas en general, de acuerdo al estado o el momento de la vida. Hace 10 años me pasó (un bloqueo creativo), pero en este momento no es el caso (…), tengo dos discos más en la época del covid-19”.

La ‘encrucijada’ que tuvo Juanes no fue tanto por hacer o no el disco, fue más por la selección del material. “Mi educación musical no es atípica”, explica. “Siendo un adolescente en Colombia, antes de la adopción del rock 'n' roll en América Latina, crecí escuchando música popular, del tipo en el que simplemente cogíamos una guitarra y cantamos. Más tarde supe sobre The Rolling Stones y Bruce Springsteen, pero al principio solo era música popular”, revela Juanes ante el abanico de posibilidades que podía cubrir.

El Juanes de hoy

Con 48 años, Juanes busca seguir más sus instintos y el riesgo de alejar a los seguidores o no lograr nuevos fans no le preocupa. “El riesgo siempre existe en cualquier proyecto. No estoy buscando las tendencias, lo que está de moda o los 'likes' o lo que tú quieras decir, para mí es más un tema artístico y que quería hacer, simplemente”.

Pero esta abstracción de lo que sucede hoy no lo hace evadir la situación de su país. “Es inevitable alejarse de esa realidad”.

Su opción personal no es dejar de hacer música, “el arte es una forma de expresar que para mí es válida, que desde 'pelao' siempre estoy en eso. Mi disco que salió hace dos años fue el 21 de noviembre (2019), el día de las marchas, y esta es la segunda vez que el álbum coincide con las marchas. Es un poco lo que hace parte de nuestra realidad cotidiana de Colombia”.

Lo que está ocurriendo en Colombia no le es indiferente: “A mí me importa el país, quizá más ahora que antes. Hoy tengo otra forma de ver las cosas. Lo que está pasando ahora es un tema delicado y es un tema histórico, no es de un día para otro, es una cosa de muchos años, en donde no hemos podido realmente entender el país que somos de verdad”.

Juanes y el futuro

A pesar de que el tiempo ha cambiado a Juanes, lo que no ha modificado es su esperanza, “que pronto las cosas puedan cambiar de una manera positiva”.

Juanes tiene la certeza de que después de este álbum habrá una nueva etapa, sin embargo no especula mucho sobre ese posible futuro; donde podría haber otro disco similar a Origen con artistas actuales que admira.

“La infancia para mí fue alrededor de la música popular y digamos que la adolescencia y la época más adulta fue más alrededor del rock en español y el metal, entonces no sé cómo seré yo dentro de 20 años tratando de hacer un 'cover' de hoy, o sea, no puedo imaginarme ni siquiera. Yo creo que me voy a quedar haciendo lo que me nace y cada vez será un momento diferente”.