Con un acervo de obras que se aproximan a su legado y de piezas de la autoría de sus contemporáneos, la galería Nueveochenta celebra el centenario del natalicio de Eduardo Ramírez Villamizar, uno de los referentes más importantes de las artes plásticas en Colombia.

Este jueves, a partir de las 7:00 p.m., los bogotanos y visitantes de la capital podrán visitar esta exposición, la cual será el primer escenario del homenaje que organiza la Corporación Eduardo Ramírez Villamizar a este destacado escultor, pintor y dibujante santandereano, a lo largo del segundo semestre del año.

“Iniciamos esta celebración con una exposición en la galería Nueveochenta, en Bogotá, que trabaja con parte de los herederos y el proyecto de Ramírez Villamizar en una labor que se ha venido realizando desde hace varios años. Esta es una exposición puntual que busca celebrar su legado y su trabajo”, le dijo en entrevista a EL NUEVO SIGLO Nicolás Bonilla Maldonado, presidente de la Corporación.

La exposición contará con obras que mostrarán desde la etapa más temprana de creación de Ramírez Villamizar hasta sus últimas piezas. Así se podrán encontrar en esta propuesta pinturas y dibujos realizados en los años 50, relieves, esculturas de metal pintado y oxidado y collages de los años 60, así como esculturas de los años 70, entre muchas más. “Es una mirada general a toda su producción a partir de diferentes técnicas y aproximaciones, siempre teniendo como eje el arte abstracto”, señaló Bonilla.

En el primer piso de la galería bogotana se exhibirá el legado del artista con todo el acervo de su obra. Mientras que en el segundo piso se podrán encontrar las creaciones de varios artistas, en su mayoría contemporáneos y amigos cercanos del escultor colombiano.

“Se exhibirán piezas de otros artistas para contextualizar su trabajo dentro de la plástica colombiana. Por eso vamos a ver obras de Negret, Carlos Rojas y John Castles, entre otros, quienes compartieron las preocupaciones siempre alrededor de la escultura y de la abstracción con Ramírez Villamizar. Entonces no solo es la obra de él, sino que también queremos homenajearlo a partir del trabajo de sus colegas y amigos”, explicó el también artista Nicolás Bonilla.

Para el gestor cultural, presentar esta exposición en Nueveochenta para el inicio del homenaje a los 100 años del artista es significativo por el trabajo que ha hecho la galería al incluir grandes del arte moderno. “Esta galería es un espacio de arte contemporáneo, donde sus artistas son representados en la mayoría por gente joven que trabaja desde un lenguaje más contemporáneo. Pero creo que la galería ha hecho un esfuerzo en los últimos años de integrar artistas modernos a su discurso y exposiciones, como Carlos Rojas o Ramírez Villamizar, y creo que ese es, precisamente, el enlace que se debe hacer en el arte colombiano y es no perder el hilo de la historia y revisar siempre nuestros artistas modernos. Es clave para la construcción del arte moderno, no simplemente dejarlos atrás, en los libros, sino que estén presentes”.

Una figura vanguardista

Este maestro del arte, que nació en agosto de 1922 en Pamplona, Norte de Santander, fue el menor de 11 hermanos y creció en una ciudad que aún mantenía un espíritu colonial, en donde la religión católica y la vida conventual influenciaban día a día a sus habitantes.

Sus primeros encuentros con el arte fueron a temprana edad. Uno de ellos tuvo lugar durante el colegio, donde en la clase de obras manuales realizó una escultura de un perro hecha en barro, así como también conoció la pintura en los cuadros que colgaban en las paredes de las iglesias. “Mis primeras misteriosas experiencias con la belleza artística las sentí en esta Catedral en Pamplona, mirando los santos, los retablos; asistiendo a ceremonias religiosas emocionantes, en donde el olor a incienso me quitaba la respiración. En estas ceremonias oía los magistrales coros del seminario mayor, acompañados con la música del órgano que quizás era obra de Palestrina o Handel”, dijo en vida el artista.

Ramírez, aunque desde su infancia y adolescencia se inclinaba por las artes plásticas, en 1940 cursó arquitectura en la Universidad Nacional de Bogotá. Sin embargo, tres años después desistió de esta carrera para empezar a pintar con un estilo expresionista, inspirado por el estilo de Georges Rouault.

A comienzos de la siguiente década el artista, gracias a su paso por París, comenzó a interesarse por el arte abstracto, llevándolo a su país natal y convirtiéndose en uno de los primeros en apostarle a este tipo de arte en Colombia.

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“Ramírez Villamizar es clave en el arte colombiano por ser uno de los pioneros de la abstracción. Fue de las primeras personas que en los años 50 empezaron a hacer este estilo de arte, lo cual fue una cosa totalmente novedosa, vanguardista y nunca antes vista en nuestro país. Empezó haciendo pinturas y dibujos, jugando un poco con la geometría, las figuras, los volúmenes y los colores. Toda su trayectoria siempre giró alrededor de todas posibilidades del arte geométrico abstracto”, indicó Bonilla.

El experto también destaca sus viajes a Francia en los años 50 y a Nueva York en los 60 como algunos de los momentos más importantes de la vida de Ramírez, pues permitió que el arte nacional llegara a terrenos extranjeros. “Fue un artista importante, no solamente para el contexto colombiano, sino también para el extranjero, ya que es un personaje que ha internacionalizado el arte colombiano desde muy temprano en el siglo XX y también ha sido un embajador de nuestra cultura en diferentes lugares del mundo”, comentó.

Después de esta exposición en la galería Nueveochenta, la Corporación Eduardo Ramírez Villamizar continuará con el homenaje al escultor santandereano con un ciclo de diferentes actividades en Medellín, Bogotá y Pamplona.

Dentro de esta programación se llevará a cabo el lanzamiento del archivo digital de este maestro del arte de la mano de la Universidad de Los Andes, para el cual se digitalizaron cerca de 20 mil archivos, entre documentos, fotografías, imágenes de sus obras y catálogos alrededor del legado de Ramírez Villamizar. Además, va a estar acompañado de una exposición de este acervo en la instalación de la Universidad.

También se llevarán a cabo actividades y exposiciones en el Museo de Ramírez Villamizar de Pamplona, en la Universidad de Antioquia y en la Torre Colpatria en Bogotá.