Tras restringir el uso de las redes sociales adoptó sanciones contra jefe de gobierno hongkonesa y otros 10 funcionarios, en represalia por la ley de seguridad impuesta por China
Estados Unidos escaló su enfrentamiento con China al sancionar a las principales autoridades en Hong Kong, luego de ordenar fuertes restricciones contra los gigantes de las redes sociales de propiedad del gigante asiático TikTok y WeChat.
En la decisión más dura de Washington con respecto a Hong Kong desde que Pekín impuso una estricta ley de seguridad en ese territorio, el Tesoro anunció el congelamiento de todo activo estadounidense de la jefa del ejecutivo, Carrie Lam, así como de otros 10 altos funcionarios.
La medida también penaliza cualquier transacción financiera de Estados Unidos con los 11 funcionarios, entre los que están Chris Tang, comisionado de policía de Hong Kong, y Luo Huining, el director de la Oficina de Enlace, una pata de Pekín en el centro financiero internacional.
"Las medidas de hoy envían un mensaje claro de que las acciones de las autoridades de Hong Kong son inaceptables", dijo el secretario de Estado, Mike Pompeo.
Pompeo señaló que la ley, considerada por activistas como un arma legal para acallar a los disidentes, violó las promesas hechas por China antes de que el Reino Unido devolviera la colonia en 1997.
El Tesoro dijo que Lam "es directamente responsable de implementar las políticas de represión de la libertad y los procesos democráticos de Pekín".
Un alto funcionario de Hong Kong, el secretario de Comercio Edward Yau, calificó de "salvajes" las sanciones de EEUU.
"Si Estados Unidos toma unilateralmente este tipo de acción irracional, terminará afectando a las empresas estadounidenses", advirtió Yau.
Las sanciones estadounidenses son respuesta a la adopción por parte de China a fines de junio de una ley de seguridad impuesta en Hong Kong, luego de protestas masivas, y a veces destructivas, en favor de la democracia el año pasado.
Desde entonces, las autoridades han retrasado las elecciones, argumentando la crisis del coronavirus y, según Pekín, emitieron órdenes de arresto contra seis activistas prodemocráticos en el exilio.
Al reaccionar a las sanciones contra 11 líderes de Hong Kong, un alto cargo de dicho territorio dijo que son "salvajes", "no razonables" y estima que estas medidas tendrán consecuencias para las empresas estadounidenses.
"Este tipo de sanciones que apuntan a funcionarios y dirigentes de otros países son salvajes, desproporcionadas y no razonables", dijo indignado el secretario de Comercio de Hong Kong, Edward Yau. "Si Estados Unidos adopta unilateralmente este tipo de acciones no razonables, terminará afectando a las empresas estadounidenses", agregó.
Tictac para TikTok
La nueva ofensiva contra China se produce luego de que el jueves Donald Trump dispusiera importantes restricciones en Estados Unidos contra las aplicaciones de videos cortos TikTok y de mensajería WeChat.
Por decreto, Trump dio a los estadounidenses 45 días para dejar de hacer negocios con esas plataformas.
El presidente citó riesgos de seguridad nacional para justificar las medidas, que también pusieron en duda las operaciones estadounidenses de la empresa matriz de WeChat, Tencent, un actor poderoso en la industria de los videojuegos y una de las empresas más ricas del mundo.
Según el decreto de Trump, los datos de TikTok, que ha sido bajada 175 millones de veces en Estados Unidos y más de mil millones de veces en el mundo, puede potencialmente ser usada por China para detectar la ubicación de empleados y contratistas del gobierno estadounidenses, construir expedientes de personas para chantajearlas y realizar espionaje corporativo.
El jueves, el Senado estadounidense votó para prohibir que TikTok sea instalada en los teléfonos de los funcionarios federales. El proyecto de ley aprobado por el Senado controlado por los republicanos aliados de Trump ahora debe pasar a la Cámara de Representantes, dominada por la oposición demócrata.
China reaccionó denunciando "una manipulación y una represión políticas arbitrarias" de Estados Unidos, según el portavoz del ministerio chino de Relaciones Exteriores, Wang Wengbin.
Usuarios de la red social Weibo, un equivalente chino a Twitter, lamentaron la medida contra WeChat.
"¿Cómo se van a contactar los estudiantes en el extranjero con sus familias cuando veten WeChat?", dijo uno.
Las nuevas restricciones hundieron las acciones de Tencent en la bolsa de Hong Kong, que llegaron a desplomarse un 10% antes de terminar con una caída del 5,04%, borrando casi 50.000 millones de dólares de su capitalización.
El decreto de Trump afirma que TikTok, cuyos videoclips incluyen desde tutoriales de tinte para el cabello hasta rutinas de baile y bromas sobre la vida cotidiana, podría ser utilizado por China para rastrear a los empleados federales estadounidenses, armar expedientes sobre personas para chantajearlas y realizar espionaje corporativo.
TikTok, que ha negado reiteradamente compartir datos con el gobierno chino, dijo que estaba "conmocionado" por el decreto "emitido sin el debido proceso".
La aplicación propiedad de ByteDance, con sede en China, prometió buscar "todas las soluciones disponibles" para asegurarse de que se cumple la ley y amenazó con tomar acciones legales.
WeChat es una plataforma de mensajería, redes sociales y pago electrónico que reporta tener más de 1.000 millones de usuarios, y muchos la prefieren al correo electrónico.
¿Repercusiones para EEUU?
Daniel Castro, de la Fundación para la Innovación y la Tecnología de la Información (ITIF), con sede en Washington, dijo que las medidas probablemente sean contraproducentes.
"Las acusaciones de riesgos de seguridad deben estar respaldadas por pruebas contundentes, no insinuaciones sin fundamento", dijo.
"Las empresas tecnológicas estadounidenses pueden perder una participación significativa en el mercado global si otros países siguen un estándar similar y las bloquean de sus mercados debido a preocupaciones sobre la vigilancia del gobierno estadounidense", agregó.
Trump fijó para mediados de septiembre la fecha límite para que TikTok, con 175 millones de descargas en el país, sea adquirida por una empresa estadounidense o su operativa sea prohibida en Estados Unidos, lo que llevó a Microsoft a acelerar sus conversaciones para comprarlo.
Washington también se ha enfrentado con el gigante chino Huawei, al que acusa de ser una herramienta de espionaje de Pekín.
En este marco, servicios de inteligencia de Estados Unidos estimaron que China preferiría que Trump, considerado un personaje "imprevisible" por Pekín, pierda los comicios en noviembre.
Según William Evanina, director del Centro Nacional de Contrainteligencia y Seguridad, "China ha estado expandiendo sus esfuerzos de influencia antes de noviembre de 2020 para delinear el ambiente político en Estados Unidos".
"Pekín reconoce que todos estos esfuerzos pueden afectar la campaña presidencial", agregó el funcionario que monitorea las amenazas a la elección, incluidas otras de Irán y Rusia.