Primero la ciudad | El Nuevo Siglo
Jueves, 31 de Octubre de 2019

El país dio un ejemplo de madurez democrática. Estas elecciones fueron muy particulares, pues por primera vez los grupos significativos de ciudadanos, movimientos alternativos y coaliciones derrotaron a los partidos políticos. Fueron pocos los mandatarios elegidos de manera plena por los partidos. Quizás la razón más lógica es el desgaste partidario, la corrupción y la hegemonía política. En los cuerpos colegiados también se dieron cambios, los partidos disminuyeron cabildantes mientras los movimientos independientes crecieron.

La polarización resultó vencida, el uribismo y el petrismo fueron grandes perdedores. El expresidente Uribe con humildad y reflexión acepto la derrota, el senador Petro ha guardado silencio. Ganaron las ciudades, hubo sorpresas como la de Medellín, Cartagena, Cúcuta y otras tantas. En ciudades como Barranquilla y Bucaramanga presentaron continuidad, pues el pueblo consideró buenos mandatos.

En el caso de Bogotá si bien la Alcaldesa ganadora se perfilaba, las encuestas la fueron deslizando hasta colocarla en un segundo plano y estas se equivocaron. El bogotano que vota mas por opinión que por organización, decidió, pues el mensaje de la candidata Claudia López contra la corrupción, la defensa de las clases más pobres, su perfil de mujer luchadora, frentera y valiente, mas allá de sus condiciones personales de vida, le valieron para convencer al electorado que debería ser la futura gobernante.

Objetivamente y gustando o no a muchos, la realidad es que ella fue la elegida y quien llevará el destino de la ciudad en los próximos cuatro años, asumiendo el reto de las ofertas de su programa, las enormes necesidades y problemas de Bogotá, con un Concejo dividido entre aliados, opositores e independientes. La alcaldesa electa en su discurso de triunfo felicitó y tendió la mano a sus contrincantes electorales, los mencionó uno a uno y los invitó a que juntos sacaran la ciudad adelante. A su vez todos ellos reconocieron el triunfo de la primera mujer alcalde de la capital, quien dijo que electa por una mayoría, gobernará para todos.

Desde luego, primero la ciudad que clama a gritos grandes necesidades pendientes, soluciones imperantes y un desarrollo necesario. Esperemos pues la realidad de esta nueva administración que tiene la oportunidad de satisfacer anhelos y esperanzas de los bogotanos, de resolver situaciones que han sido insalvables hasta ahora y de llevar a cabo ejecuciones que quedan pendientes como el Metro, nuevas troncales de Transmilenio, vias de descongestionamiento, mayor control y seguridad, mas vivienda, trabajo, cultura ciudadana y modelo de educación en valores entre otros temas.

Bajo una sindéresis razonable, Colombia se desarrolla democráticamente como un pueblo que asume la responsabilidad de elegir a sus gobernantes, derrotar el clientelismo y la corrupción electoral. Para bien o para mal ha elegido popularmente a unos 20 mil mandatarios y cabildantes.

Réquiem por los partidos políticos que abandonaron sus ideales, que sino se recomponen, tienden a desaparecer dando paso a nuevas fuerzas emergentes que orientarán a la política en el presente y futuro. Mientras tanto darles la oportunidad sin tanta crítica a los mandatarios electos, para que se sientan respaldados y comprometidos y hagan de su gestión un resultado positivo que lo necesita Colombia.

arangodiego@hotmail.com