El Museo Nacional teje un nuevo espacio para sus memorias | El Nuevo Siglo
La exposición, que se abrió desde esta semana, estará disponible hasta el 11 de enero en la sala múltiple.
Foto cortesía
Jueves, 16 de Diciembre de 2021
Redacción Cultura

Mensajes registrados en el libro de visitas, recuerdos de actividades musicales con setenta años de historia y la hoja de vida de objetos patrimoniales son algunos de los elementos que componen la exposición “Un espacio para las memorias: tejiendo puentes con el Centro de Documentación”, que organiza el Museo Nacional de Colombia.

Esta muestra, que estará abierta desde este mes hasta el 11 de enero de 2022, busca visibilizar el Centro de Documentación del Museo Nacional como un espacio vital que se ha nutrido con memorias no solo institucionales, sino también con los recuerdos de las personas que la conforman y donde puede tener lugar nuestro presente como públicos internos o externos.

Se trata de una experiencia expositiva que integra las reflexiones e investigaciones acerca de las colecciones hechas por el grupo de trabajo del Laboratorio de cocreación 2021, que tiene como finalidad la generación de diálogos y la construcción de relaciones sobre la memoria de las personas y del museo.

“Todos tenemos un lugar en el que documentamos nuestra vida, un universo de elementos que archivamos, ordenamos y desordenamos, visualizamos y escondemos u olvidamos, de acuerdo con nuestros sentimientos y formas de valoración. Volver al archivo es activar, revivir y cuestionar los objetos, es excavar en los documentos hasta encontrar las memorias y descubrirnos en ellas”, señala Catalina Hoyos, coordinadora del Curso de Formación y Voluntariado.

Activar las colecciones, visibilizar y asignar un sentido al Centro de Documentación del Museo Nacional fueron las acciones alrededor de las cuales giró un proceso que se denominó Laboratorio de cocreación. En este espacio de encuentro, los integrantes del Curso de Formación y Voluntariado 2021 se conectaron con sus memorias e intereses particulares, las compartieron y vincularon entre sí para explorar el Centro de Documentación desde preguntas, hallazgos y emociones.


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Esta exposición es la última etapa de un largo proceso de cocreación, en el que el grupo concibió al Centro de Documentación como un puente que los conectaba con el pasado y un espacio en donde sus memorias se integraban con las de otros.

La exposición se divide en cuatro secciones:

Memorias de públicos

Aquí se da relevancia a las memorias de los públicos, por ello se han incluido algunos mensajes que han quedado registrados en los libros de visitas, cartas y estudios de públicos.

Memorias del auditorio

El auditorio Teresa Cuervo Borda del Museo Nacional de Colombia ha sido por más de setenta años un lugar para la creación de experiencias colectivas, recuerdos sonoros, emocionales, corporales y musicales. La conexión que se establece con este lugar atraviesa el tiempo para artistas, académicos, públicos y trabajadores del museo. Todos cuentan con vivencias que merecen ser relatadas.

Formatos de la memoria

El Centro de Documentación ha resguardado archivos de distintos tipos durante años, conservando memorias de nuestra sociedad y del día a día, a través de fotografías, cassettes de videos y audio, CD, DVD, disquetes, archivos digitales, entre otros formatos.

¡Lo que no ves!

En esta sección se presenta una parte de la vasta estructura que compone la información archivada en el Centro de Documentación y se da cuenta de la historia de vida de las colecciones patrimoniales del Museo Nacional. El Museo cuenta con 16.624 objetos registrados como parte de su colección, de los cuales aproximadamente 1.857 están actualmente en exhibición. Entre ellos se eligieron tres piezas icónicas para dar a conocerlas y explorar su hoja de vida.

Centro de Documentación

Desde sus inicios en 1823, el Museo Nacional de Colombia ha resguardado diferentes tipos de objetos y documentos. Dentro de su naturaleza coleccionista, se ha gestado un espacio de resguardo que va de la mano con la labor cultural de la institución. En el siglo XX, este lugar se denominó “la biblioteca del museo”, la cual adquirió poco a poco mayor reconocimiento con el paso del tiempo. Hoy en día, este espacio, llamado Centro de Documentación, sigue aumentando sus colecciones, recibe visitas externas e internas y es una de las partes esenciales del museo.