Perú cerrará sus playas y piscinas públicas el 31 diciembre y el 1° de enero para evitar aglomeraciones y riesgos que puedan propagar nuevos contagios del covid-19 en las festividades del año nuevo, informó el gobierno.
"A nivel nacional los días 31 de diciembre y 1 de enero, no se permitirá el uso de las playas, lagos, ríos, lagunas y piscinas públicas", dijo en conferencia de prensa el ministro de Salud, Hernando Cevallos.
"Primero está defender la salud de la población y evitar contagios masivos", agregó Cevallos.
Indicó que el resto de los días de verano se podrá concurrir a las playas respetándose el aforo y las medidas establecidas por el gobierno frente a la pandemia como uso de mascarilla y distanciamiento.
Las Fuerzas Armadas y la policía apoyarán a los municipios en la vigilancia de las playas ya que durante las fiestas navideñas cientos de personas acudieron de paseo a las playas, lo que provocó aglomeraciones y por ende aumento de contagios de covid, los cuales se duplicaron a más de 1.500 por día.
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Otra medida aplicada, tras el rebrote, fue la prohibición de las reuniones familiares y las fiestas en Navidad y Año Nuevo, y adelantó el toque de queda que va de 11:00 pm a 4:00 am durante esos días.
Perú espera mitigar con esas medidas el despegue de la muy contagiosa variante ómicron, de la que registra 116 casos, según el Ministerio de Salud.
Además, reforzó la campaña de vacunación, que alcanza al 77% de la población objetivo
El gobierno peruano extendió hasta el 31 de enero el estado de emergencia vigente desde hace 21 meses por la pandemia.
Con 33 millones de habitantes, este país sudamericano tiene la mayor tasa de mortalidad por la pandemia en el mundo: 6.122 por cada millón de habitantes, según un balance de la AFP basado en cifras oficiales.
Perú acumula más de dos millones de casos de covid-19 y más de 202.000 muertos desde el inicio de la pandemia a inicios de 2020.