Abismo intelectual entre Milei y Petro | El Nuevo Siglo
Martes, 28 de Enero de 2025

Mientras hace unos días el presidente de Argentina, Javier Milei, se lucía ante los líderes del mundo en el foro financiero de Davos con un claro discurso exento de vacilaciones, con datos concretos y posiciones serias así como bien argumentadas, sobre el urgente y necesario desmantelamiento de la agenda woke que está tratando de tomarse el mundo, Gustavo Petro, su homólogo colombiano, en su mejor estilo cantinflesco, puso en peligro las relaciones centenarias de Colombia con Estados Unidos, con consecuencias que, de no haberse reversado la crisis, habrían sido catastróficas para nuestro país.

Esta última bufonada de Petro, al negarse después de haberlos aprobado, a recibir dos aviones militares estadounidenses con indocumentados deportados a Colombia por el gobierno de Trump, causó tal indignación de dicho presidente quien, inmediatamente, amenazó con aumentar el 25% los aranceles para los productos colombianos, la cancelación de las visas de Petro, sus familiares y los colaboradores del gobierno, además del cierre de la oficina de visas, entre otras sanciones, si no se recibía a los deportados inmediatamente.

Lo que siguió fue una serie de mensajes de Petro tan absurdos, groseros, incongruentes y ampliamente estúpidos que dan vergüenza. El pueblo dice que Petro estaba drogado o borracho, o las dos cosas; o sufría de una crisis de histeria como, aparentemente, sucede con una frecuencia verdaderamente alarmante.

¿Está cuerdo Petro? Esta es una pregunta muy válida que el pueblo colombiano se hace a diario ¿Es Petro capaz de gobernar o perdió la razón? O, acaso, estas constantes explosiones de palabrería y acciones inconsistentes con la realidad son un montaje para distraer la atención de una agenda propia para cubrir cómo, poco a poco, ha ido minando nuestra de democracia. Algo que va muy de acuerdo con la agenda woke que atacó Milei en Davos. Realmente esta última pataleta verbal de Petro contra Trump fue perfecta para tapar la catástrofe que atraviesa el país en El Catatumbo.

La agenda woke ha sido utilizada y abusada por los neocomunistas, aquellos que se hacen llamar socialistas de siglo XXI, reales enemigos de la democracia, tal como lo es Petro. No sería la primera vez que él la utiliza.

Ya es hora de exigir un examen médico que garantice al país que Petro está cuerdo, o está consumido por adicciones que le impiden gobernar.

Sabemos cómo la doctrina woke se han incrustado en las democracias latinoamericanas para destruirlas desde adentro; para destruir la libertad, la propiedad privada, las costumbres tradicionales, las creencias religiosas y morales.

Milei acusó al Foro Económico de Davos de haberse dejado impregnar de las ideas woke. Sobre todo, esa de convertir a los blancos en los “villano” de todos los males de los últimos siglos.

Olvidando que el progreso de la humanidad en todas las ciencias, la medicina, la economía, la lucha contra el hambre y la miseria, los derechos humanos, inclusive, la destrucción de la esclavitud y miles de ideas benéficas que surgieron en los siglos XXVIII, XIX y XX fueron, mayormente, obra de los blancos.

Que gran abismo intelectual existe entre Milei y Petro. Milei se está convirtiendo en alguien admirado por su capacidad de ejecución y la claridad de sus planteamientos. Petro, por otro lado, se ha convertido en el payaso del barrio latinoamericano.