La Unión Temporal Pasaportes (UT) desistió de la demanda interpuesta contra la Cancillería de Colombia, que exigía una indemnización de $117.000 millones debido a la declaratoria de desierta de la Licitación Pública 001 de 2023. Esta decisión se enmarca en un contexto de conciliación, donde la UT buscó garantizar la continuidad del servicio de expedición de pasaportes y visas en el país.
La controversia comenzó cuando el entonces canciller Álvaro Leyva declaró desierta la licitación el 13 de septiembre de 2023. El motivo principal detrás de esta declaratoria fue la preocupación por garantizar el principio de libre concurrencia en el proceso de selección.
Leyva argumentó que no se habían establecido las condiciones adecuadas para permitir la participación de múltiples oferentes, lo que podría haber favorecido a un único contratista, Thomas Greg & Sons, que fue proveedor habitual desde 2007.
El Ministerio de Relaciones Exteriores contrató a la UT para llevar a cabo las actividades necesarias para la fabricación y personalización de pasaportes. A pesar del conflicto inicial, los contratos se han ejecutado satisfactoriamente, lo que llevó a la Unión Temporal a considerar que su pretensión había sido resarcida en un grado aceptable. Por esta razón, decidieron desistir voluntariamente de las demandas para cerrar el conflicto con la cartera.
“El propósito de los integrantes de la Unión Temporal Pasaportes 2023 siempre ha sido servir al país y en especial al Ministerio de Relaciones Exteriores con la seriedad, el compromiso y los estándares de calidad que nos han distinguido en el mercado desde hace 40 años”, se lee en el comunicado.
"UT ha decidido voluntariamente desistir de las pretensiones de la demanda para dar por terminado el conflicto que sostuvo con el Ministerio, el cual no se identifica con la visión corporativa de los miembros de la UT”, indicó el comunicado.
Según declaraciones de la empresa, el acuerdo alcanzado implica que continuarán participando en la producción de pasaportes hasta septiembre de 2025, fecha en la cual la Cancillería implementará un nuevo modelo en colaboración con Portugal.
El Gobierno colombiano, por su parte, ya había firmado un memorando de entendimiento con Portugal para cooperar en el desarrollo de este nuevo tipo de pasaportes, delegando a la Imprenta Nacional la responsabilidad del proceso, que aún se encuentra en sus primeras etapas.
Este acuerdo, que comenzará a ejecutarse en 2025, busca reducir la dependencia de proveedores externos y garantizar la seguridad en la emisión de los documentos.