ALFONSO ORDUZ DUARTE | El Nuevo Siglo
Sábado, 16 de Agosto de 2014

Decisiones políticas importantes

 

Las cuestiones o asuntos de  interés nacional, para que puedan tener vida requieren de decisión política.  Por ella debe entenderse básicamente que todos aquellos estamentos o personas que conocen del asunto o tema, deben hacer explícito su convencimiento de lo que se quiere hacer o proponer; también quienes dentro de un clima de sano debate deben ser oídos, pues toda oposición sana siempre tiene aspectos constructivos y positivos.

Uno de los temas que crearon controversia en su momento, fue el Plan Vial que se realizó en la época en la cual fue ministro de Obras Públicas, Jorge Leyva, siendo presidente Laureano Gómez. Quizá fue uno de los programas debidamente estudiado, en cuanto a la necesidad de mejorar la precaria red de carreteras. Uno de los grandes inconvenientes fue que el país no contaba con empresas con la experiencia que las entidades de crédito exigían para el ambicioso plan. Se trajeron firmas internacionales las cuales para adelantar el programa, se asociaron con las modestas firmas colombianas. Se hicieron las obras y quedó el sedimento de la experiencia.

Las palabras del señor presidente Santos al tomar posesión del cargo, en materia de infraestructura física estuvieron muy sólidas; podemos esperar que en este cuatrienio se pondrá énfasis en vías como las del plan denominado 4G. Igualmente podremos esperar que el río Magdalena recupere su valor como vía de transporte natural como que discurre por la geografía nacional de sur a norte. En materia de infraestructura social se anunciaron planes de educación quizás con énfasis en la tecnológica y también en el mejoramiento de la calidad de los maestros que se ocuparán de los  los niños en sus primeros años escolares. Dicen los expertos que luego de un cierto nivel de aprendizaje, (quinto de primaria) no se regresa al analfabetismo. Si ese propósito va acompañado de un programa de salud como el anunciado, se habrá dado un gran paso en el mejoramiento de la infraestructura social, la cual será una base sólida para  el bienestar social y también para la paz.

Extrañamos la ninguna mención sobre el tema ferroviario alrededor del cual, cuando no se había inventado el motor de explosión interna, le dio aliento al progreso del país. No hay que olvidar que uno de los temas de meditación del Libertador, fue la construcción del ferrocarril en el Istmo de Panamá y que tal vez Colombia fue el primer país en América Latina que optó por este medio de transporte hasta lograr completar una red ferroviaria que fue unida con la construcción del Ferrocarril del Atlántico. Unió las líneas dispersas y el Atlántico en Santa Marta con el Pacífico en Buenaventura y se creó la empresa Ferrocarriles Nacionales de Colombia, la cual lamentablemente desapareció. Es cierto que los desarrollos modernos obligan a nuevos medios de transporte. El ferrocarril, sin embargo, no atenta contra el medio ambiente e igualmente es cierto que sirve para el transporte de pasajeros y grandes volúmenes de carga a largas distancias. ¿Será que este medio de transporte no cuenta con la decisión política que se necesita para desarrollarlo hoy prácticamente desde cero? Ojalá que así  no fuera para bien del país.