El Gran Estudio Semana, del CNC, es un hit periodístico. Su dato más relevante es el liderato del Senador Petro en las variantes de la encuesta. Más de un 23% considera que sería el mejor presidente, el mejor economista, el que mejor haría la paz y el que mejor haría la guerra. Cuando se creía que las respuestas de Petro a Vicky Dávila, causarían temor, lo que lograron fue alimentar sus huestes. También causaron una estampida de la treintena de precandidatos hacia un silencio medroso. Ninguno ha salido a defender la democracia colombiana, la más vieja del Continente y cimentada sobre los pilares de la libertad del hombre y el respeto a las leyes. La negación de nuestra democracia es de la misma estirpe del desprecio de Hugo Chávez a la Constitución venezolana cuando se posesionó, por primera vez, como presidente de su país. ¿Hacia dónde nos pretende conducir Gustavo Petro?
Apenas me enteré de la toma del Palacio de Justicia por el M-19, llamé al Magistrado Alfonso Patiño Roselli con quien debía encontrarme el siguiente fin de semana para escuchar los cassettes amenazadores que recientemente había recibido. Me dijo enseguida: Ya vienen para acá, están preguntado por la Sala Constitucional. Repetí la llamada como a las dos horas. Está entrando humo a la oficina, empezaron a quemar los expedientes, me dijo. De la tercera llamada nunca obtuve respuesta. Cayó inmolado en la barbarie desatada por los mandaderos de Pablo Escobar. Así lo consignan las comisiones investigadoras designadas por el Presidente de la República y por la Corte Suprema de Justicia.
Pocos años después, Belisario Betancur recibió la visita de Carlos Pizarro y Antonio Navarro, entre otros, quienes lo reconocieron como el gran pionero de la paz. Señalaron que lo de la toma del Palacio de Justicia había sido un error. Cuando Belisario se lo contó a varios amigos entendimos que su alma noble había recibido un gran alivio. Fue entonces, cuando como Adriano, “se puso a buscar debajo de las piedras el secreto de las fuentes”. Los sofismas injuriosos del senador Petro no alcanzan a esas alturas del espíritu.
Volviendo a la encuesta, la foto del instante es toda una foto: Gustavo Petro encabeza el pelotón. No será fácil alcanzarlo, se ha labrado con inteligencia e insistencia su propio espacio político. Trasmite pasión a las masas empobrecidas por la pandemia. Y, frente a la negación de los valores colombianos que enarbola, sus contendores tendrán que ofrecer una sociedad de la esperanza. Sin embargo, en la segunda vuelta se perfila como victorioso Sergio Fajardo. Tendrá que ponerse los guantes rápidamente. Su tono profesoral no entusiasma pero trasmite confianza. Presiento que un tiquete ganador sería: Fajardo - Galán. Juan Manuel sostiene en sus hombros la gloria bien ganada de su padre. Pero ojo: la suma de los candidatos de centro-derecha supera la suma de los punteros.
Entre estos últimos, Marta Lucía Ramírez dará la pelea. Su tenacidad y laboriosidad le son reconocidas. Deberá reconstruir sus relaciones con el Conservatismo. Representa, como ninguna otra, el ascenso de la mujer en la sociedad contemporánea.
Finalmente, no se debiera olvidar el gran luchador que es Álvaro Uribe. Nos rescató del terrorismo, de los retenes milagrosos, del amplio dominio territorial de las Farc, que amenazaban a diario nuestra libertad y nuestra vida. Y se ha batido siempre victorioso en la arena política. Esperemos, esta contienda se decidirá en 4 vueltas: Consultas, elección de Congreso y las dos presidenciales.