El legado de los incas | El Nuevo Siglo
Miércoles, 14 de Febrero de 2024

Han pasado algo mas de 800 años que surgió la civilización Inca conformando un enorme territorio al que lo llamaron el Tawantisuyo, que comprendía desde Perú, Bolivia, Ecuador y sur de Colombia. Su organización social y económica era admirable, existía trabajo y bienestar para la gente, al punto que dentro de la expansión del imperio llevaron su modelo a diferentes tribus del altiplano con sus políticas sociales, productivas, de salud y económicas. Los incas no invadían pueblos, los convencían llevándoles sus avances a cambio de tributación, algo legitimo.

Pero una de las enseñanzas que aplicaban y exportaban eran los principios y valores con los que una sociedad debería vivir, como leyes básicas para mantener el orden social, estas eran: no robar, no mentir y no ser ocioso. También el adulterio, la violación y la embriaguez eran castigadas con severidad. Gracias a ese código les permitió siempre vivir en un orden y respeto social, hasta la llegada de los españoles.

Para ellos el Ayllu (familia) era la base de la sociedad, lo mas importante, las tierras les eran dadas para la producción y una parte iba para el incario como tributo al Estado. Los jóvenes debían trabajar una parte a beneficio del Estado. Como normas básicas en la educación estaban la de ser honesto, limpio, vivaz, digno, dadivoso y respetar la vida; ahora bien, los valores fundamentales de vida eran el saber, el amor y el trabajo.

La gran mayoría de la población cumplía los preceptos incas, pero quienes violaban las leyes eran castigados con severidad, poniéndolos a trabajar en beneficio de la población, por lo tanto, el índice de delincuencia era ínfimo. También tenían normas muy efectivas pero censurables, pues a los ladrones les cortaban las manos, a los violadores los mutilaban y delitos atroces se pagaban con la pena de muerte.

Fueron 14 soberanos incas desde Manco Capac -el primero- hasta Atahualpa -el ultimo de ellos-, quien fue secuestrado y asesinado por Francisco Pizarro en 1.533, luego de haber pagado su rescate de 2 aposentos de plata y uno de oro.

Traigo este tema como nivel comparativo respecto al orden social y político de nuestros pueblos latinoamericanos en pleno siglo XXI, que históricamente provienen de culturas como la inca, la chibcha, la maya y azteca entre otras mas, que en gran parte desaparecieron con la conquista y posterior colonia.

Hoy, ocho siglos después con los avances tecnológicos y comunicativos, en vez de progresar política, cultural y socialmente, tenemos un retroceso donde el delito, la corrupción, el crimen, la violación, la mentira y el engaño entre otros defectos mas, impera en nuestros países, donde no se respeta la ley, a los niños se les educa en antivalores, a los jóvenes no se les da oportunidades y las constituciones de los países no son respetadas, la justicia es permisiva y en muchos casos se vende. Presidentes de países como el nuestro que favorecen a los criminales, no respetan el orden institucional, despilfarran el sagrado recurso publico y coartan el progreso.

Tendríamos mucho que aprender del legado inca y de las otras culturas ancestrales.

arangodiego@hotmail.com