GUILLERMO FRANCO CAMACHO | El Nuevo Siglo
Domingo, 6 de Octubre de 2013

SAGITARIO

Elecciones

 

Un tema de análisises el cambio previsibleen la estructura política del país resultante de las elecciones presidenciales y de corporaciones públicas del año próximo; se compararía lo existente hoy versus lo que surja y se consideran escenarios.

El primero consisteen que el actual Presidente de la República aspire a la reelección. Dicho asunto nunca se ha planteado en esta columna. ¿Por qué? Se estima, como axioma, que todo presidente aspira a repetir, salvo que llegue a la conclusión de ser imposible o muy difícil; tal fue el ejemplo de Belisario Betancur y se aventura, como causa, lo ocurrido en el Palacio de Justicia con el M-19. Se  recuerda que Juan Manuel Santos enfrentó una perspectiva compleja frente a Antanas Mockus, en 2010, y triunfó, previas las variaciones requeridas en la campaña. Además, las encuestan ubican a Santos como vencedor respecto a los rivales conocidos. Por otra parte, habrá mejorado la ejecución de la Ley de Víctimas y Restitución de Tierras, la infraestructura física, habrá adelantado explicaciones convincentes en diversos asuntos, ejemplo La Haya, y habrá cumplido los compromisos adquiridos por el paro agrario, etc.

En relación con la coalición de gobierno, regirá a la larga. Se mantendrá el liberalismo (espera creciente caudal de votos) y podrían disminuir algo el partido de la U y el conservatismo de darse la posibilidad de éxito apreciable del Centro Democrático. Lo que suceda con este movimiento es una incógnita y quien escribe ha pronosticado decadencia del uribismo, a ritmo infinitesimal, a largo término. Los verdes serían oposición junto al Polo.

¿Se reintegrarán Cambio Radical y la U al liberalismo? Esta división, coincidente con el auge del uribismo, se mantendrá a corto y mediano plazos. Conviene establecer una diferencia con lo ocurrido en la época de Jorge Eliécer Gaitán: el partido liberal unido siguió como mayoría y su totalidad se agrupó alrededor de Gaitán. La realidad vigente prosigue liberal, a Uribe Vélez se le miró como conservador y el sentimiento sigue. Es de esperar que la izquierda permanezca con sus conflictos internos y ello perjudica a Clara López y Antonio Navarro. Por último, hay un caso digno de estudio: ¿a qué se deben los frecuentes fracasos de Enrique Peñalosa en sus aspiraciones presidenciales? Es capaz, tiene talento, sólido prestigio internacional y fue buen alcalde de Bogotá.