GUILLERMO FRANCO CAMACHO | El Nuevo Siglo
Domingo, 6 de Abril de 2014

Montefiore

 

Simón  Sebag Montefiore es el autor principal de Titanes de la Historia (Crítica, Barcelona, 2012); su lectura condujo a la revisión de apartes de Historia del Arte de la Guerra (Aguilar, Madrid, 1969) del mariscal Bernard Law Montgomery. Siempre se había entendido que la versión de Ramsés II acerca del resultado aplastante y favorable de la batalla de Kadesh era correcta y parece que el empate fue lo ocurrido; el Faraón no tuvo quien lo contradijera por casi veinticinco siglos. Los hititas habían desaparecido debido al choque con el imperio asirio, o sea, una de las maquinarias de guerra más eficientes y crueles vistas por la humanidad. Ramsés II inició el choque sin tener completo su ejército de cuatro columnas, fue desbordado y se salvó al dedicarse los hititas al saqueo del tesoro egipcio; el monarca regresó a su tierra. Montefiore y Cía se ocupan de Gengis Kan, Atila y Tamerlán o Timur; Montgomery admira la sabiduría militar del primero, considera que el segundo no podía vencer a una coalición del Occidente -fue vencido en los Campos Catalaúnicos por romanos y visigodos- y nada dice respecto al tercero quien jamás fue derrotado: ¿lo estudió?

Causó desconcierto a quien escribe, hace muchos años, la ubicación de Adolfo Hitler como “posible hombre del año”; sin embargo, el asombro cesa al recordar el criterio de selección de los “titanes de la historia”: su contribución a la formación del mundo de hoy. El dictador alemán tuvo 1940, 1941 y gran parte de 1942 como años de gloria, en especial en Europa, y es acompañado por Stalin y Mao, pese a estar actos criminales asociados a sus nombres; el ruso estableció la URSS que le disputó la supremacía mundial a EE.UU. y China la imita. Colombia se destaca solo por ser el lugar de nacimiento de Pablo Emilio Escobar Gaviria, un asesino y narcotraficante torpe en su actividad y, en relación con América Latina, se citan individuos como los Duvalier (padre e hijo) en Haití, Trujillo en República Dominicana, los López en Paraguay; puede considerarse como errores la exclusión de Simón Bolívar y José de San Martín, los argentinos que han obtenido el Premio Nobel en Medicina y el general Giap, de Vietnam del Norte, recientemente fallecido. En Sun Tzu: ¿pueden aplicarse sus principios bélicos a otras actividades humanas?