El líder indígena Misak Jesús Antonio Montano fue secuestrado y asesinado cobardemente en el Cauca. Fue encontrado muerto en Popayán, el lunes, el valiente hombre que desafío a la nueva tiranía que se ha ido conformando e instalando en el territorio nacional. 

Jesús Antonio Montano Tumiña había apoyado a la campaña de Federico Gutiérrez desde su inicio en el Cauca, pero a pesar de la derrota de Gutiérrez, el 5 de junio en la vereda La Rejoya de Popayán, fue raptado el líder colombiano que fue conducido a la muerte violenta luego de eso. 

Y, es que, en varios sectores y lugares de Colombia si una persona no se muestra a favor del Pacto Histórico, es decir de Petro, Bolívar, Roy, Benedetti y Piedad, etc., puede correr riesgo su vida. Además, el líder social asesinado por las disidencias de las Farc, en específico por la estructura Carlos Patiño de esta insurgencia, a la que Montano había acusado de obligar a ciudadanos del Cauca a votar por Gustavo Petro en primera vuelta. 

El CRIC (Consejo Regional Indígena del Cauca) que bloquea las vías principales cuando se ejecutan los paros de las manifestaciones sociales orquestadas por las mismas disidencias de las Farc y sus secuaces. 

Montano es un mártir, no es el único y seguro no será el último, lamentablemente. Hay algo más que polarización en Colombia, hay una persecución política interna en la que puede peligrar la integridad física, moral y mental de la persona que se aparta de la persuasiva a la que le puede someter un determinado grupo, en lo general, los cercanos a los miembros del Pacto Histórico. 

Para la segunda vuelta se teme y se sabe desde ya que están movilizándose o inclusive que ya llegaron los terroristas de las autodenominadas líneas para agitar los ánimos de los votantes y hasta adulterar los resultados de distintas formas. 

De hecho, el director de la Policía Nacional da señal pública de alerta en las principales ciudades del país, no suspicacias sino hechos concretos, que demuestran que hay individuos y grupos que están planeando ataques terroristas y vandálicos para desestabilizar a la sociedad e incidir de forma perversa con las elecciones “democráticas” que dirán quién ocupará el palacio de Nariño. 

Además, luego de haberse revelado los petrovideos, en la opinión pública está más que claro que el Pacto Histórico juega sucio y tiene un plan organizado para tomar el poder a como dé lugar.  

El Pacto Histórico que se empieza a desmantelar, primero con el distanciamiento de Bolívar, de Piedad, luego de Benedetti y ahora de Roy, políticos que han toreado en todas las plazas políticas como de otros indoles también y que tienen una favorabilidad muy baja, terminaron restándole a Petro. 

Colombia debe saber elegir. El momento es histórico y se está jugando todo el statu quo de esta nación, los avances en materia económica y social que mal o bien se han llevado a cabo y la estabilidad que tiene la democracia, que, a pesar de no ser cien por ciento transparente o correcta, representa un modelo importante en toda la región. Está en juego el país nacional y el país político, así como el sistema económico del cual depende el país y los colombianos, el mismo al que Petro propone repensar y restituir al de principios del siglo pasado. 

@rosenthaaldavid