LA OTRA CARA
Peligra empleo
Es contundente el resultado del desplome en producción de petróleo en Colombia, ante el drástico descenso en el precio internacional por barril y el duro golpe a la capacidad financiera que comenzó a mostrar fuertes lesiones en la operación de empresas productoras y su estructura laboral generadora de empleo en los últimos 8 años en el país.
El informe de Oil & Gas Consulting de Nueva York, -obtenido por esta columna- precisa que Colombia fue clasificada en el puesto 17 entre 53 países productores de petróleo en el mundo hasta 2.014.
El detalle de las cifras, coincide en buena parte, con el Ministerio de Minas y Energía, al señalar que 14 compañías de capital nacional y extranjero, entre las que se cuenta Ecopetrol, activan la mayor producción con exploración en 418 pozos, y un total de 27 empresas que se mantuvieron en plena operación hasta mediados del último trimestre del año pasado, cuando empezó a debilitarse el mercado mundial.
De manera directa son cerca de 30 mil empleos, los que se han venido generando en el país, en cuanto a ingenieros de petróleos, geofísicos, ingenieros mecánicos, ingenieros civiles y técnicos profesionales en funcionamiento de maquinaria y equipos, activados en frentes de exploración total, con mano de obra y servicios generales de dependencias administrativas de campo. Sin embargo, los beneficiados laboralmente con el petróleo en Colombia pueden llegar a 100 mil, con personal en su mayoría, profesionales y técnicos que se desempeñan en oficinas centrales en varias ciudades, tanto de las compañías productoras, como de las transportadoras y proveedoras de equipos, subcontratadas para el desarrollo de campos de explotación. A esto se agregan importantes valores que recibe la economía social y de consumo, por ingresos en poblaciones, ciudades intermedias y capitales de departamento, en hoteles, restaurantes y transporte aéreo y terrestre. La alta dimensión de las cifras y la población afectada, equivale a una ciudad de 200 mil personas en cualquier sitio del país, estuviese en inminente crisis por incapacidad de recursos económicos.
La sugerida fusión de petroleras es aceptable en grado medio, dicen empleados y empresarios, porque las áreas adjudicadas, no son muy grandes frente a empresas de más capacidad.
Como mil veces se ha dicho, la política laboral colombiana debería incluir por Ley, subsidio de desempleo, amplio y robusto para todos los sectores productivos, aunque fuese temporal en dificultades como la actual, en que la crisis petrolera asoma con fuerte amenaza social y coloca el empleo en peligro cada día que pasa.