Llamen a Blanchon | El Nuevo Siglo
Miércoles, 8 de Abril de 2020

El novelista francés Honorato de Balzac creó, en su monumental obra de “La Comedia Humana,” al doctor Horacio Blanchon, inspirado en un reconocido galeno de la época. Cuando Balzac agonizaba, en 1850, entró a su alcoba el medico de turno a quien preguntó: ¿Cómo estoy?  Sin esperar la respuesta dijo, “llamen a Blanchon, él me salvará.” En su imaginación el personaje se volvió real.

La humanidad superará la actual pandemia, habrá relatos, películas, series de televisión. En ello pienso durante la obligada cuarentena, no quiero disminuir la dimensión del problema en el cual nos encontramos, acato la orden de aislamiento, debemos hacerlo, pero me pregunto ¿Qué pensarían Víctor Hugo, Charles Dickens, Oscar Wilde, Marcel Proust, Franz Kafka, Albert Camus, Henry Miller, Truman Capote, sobre el coronavirus desde el punto de vista literario?  Historias entrarán a formar parte del género. ¿Qué tal, por ejemplo, el caso del ex presidente de connotado club de futbol, de la tercera edad, quien supuso podía controlar la enfermedad desde su casa, sin trasladarse a un hospital, al cual llegó víctima ya de neumonía, para fallecer a los pocos días de internado?

Repaso los cuentos de Bocaccio, novela de amor y muerte, rememora  el confinamiento de siete mujeres y tres hombres,  todos jóvenes,  recluidos  en una villa en las afueras de Florencia  intentando  protegerse de la peste bubónica que asoló la ciudad en 1348; la crítica social incluida  en “ Los Novios” de Alejandro Manzoni referente a la epidemia  en Milán de 1630 y el rechazo de la población a la actitud  de sus dirigentes políticos; la “Máscara de la Muerte Roja” de Edgar Allan Poe,  que no entiende de clases sociales, ni exonera a ninguna; la descripción de Thomas Mann  del impacto de la tuberculosis, sin vacuna y de la cura climática que se aplicaba en el siglo pasado en un balneario; “La Peste” de Albert Camus, registrando el valor superior de la solidaridad ante la catástrofe;  “El Cuaderno Gris” de Josep Pla, diario de un joven de Barcelona de diez y ocho años infectado por la gripa española en 1918; “El Ensayo sobre la Ceguera,” de José Saramago;” y  “El Amor En los Tiempos del Cólera, “ de Gabriel García Márquez, interesado   en contar el mal de amores que sufrieron  Florentino Ariza y Fernandina Daza, separados por imposiciones familiares durante mucho tiempo, al final, octogenarios,  decididos a navegar  por el resto de sus vidas en un barco de río donde ondea la bandera de la pandemia.

En el revolcón estructural próximo vendrá literatura importante, solidaridad y unión son fuente para después del coronavirus, reconocimiento al lado bueno del ser humano.