Lorena Rubiano Fajardo | El Nuevo Siglo
Lunes, 27 de Abril de 2015

El Puente de Boyacá

 

Epígrafe

“La historia es cuestión de supervivencia. Si no tuviéramos pasado, estaríamos desprovistos de la impresión que define a nuestro ser”.

Robert Burns

PARECIERA  que el vicepresidente Germán Vargas, no nos conoce. No faltó sino que dijera que “los tales boyacenses no existen” para ordenar la profanación del Puente de Boyacá, pasando por encima del histórico lugar una autopista. Y los contratistas Solarte y Solarte, apoyados por el hombre sin historia, felices, van a pisotear a los boyacenses, mancillando el sitio en donde miles de compatriotas ofrendaron su vida por la  independencia, que más tarde les  permitió a Alberto Lleras y Carlos Lleras, ser presidentes.

El lugar sagrado no lo constituye solo el puente, es todo el campo de batalla, con sus árboles, rocas, ríos y  brisa que hacen parte de ese lugar sacrosanto, donde nuestros ancestros derramaron su sangre. Por eso no aceptamos que ahora, dizque por costos, pasen una mole de cemento por sus entrañas.

No hay derecho a que nos pisoteen más, a que trapeen con nuestra historia, ese es un campo venerable para nosotros y para los colombianos.

Hay un episodio, parecido y gracias al Consejo de Estado unos ingenieros torpes y eunucos mentales, tuvieron que retirar una antena de Telecom que instalaron en la explanada del templo sagrado de los koguis  en la Sierra Nevada.

Pues vamos a luchar con todo lo posible legalmente para no permitirle, ni a la concesionaria, ni al excelentísimo señor vicepresidente Vargas,  que puedan concretar ese descabellado atropello. Yo no sé si los  Vargas tengan historia, pero los Lleras sí, y los Santos tienen sangre boyacense, les solicitamos que reconsideren esa arbitraria autorización.

Invito a mis paisanos boyacenses que nos sentimos orgullosos de haber contribuido a la  libertad de los colombianos, a que declaremos persona no grata al señor Vargas, por querer violentar y desconocer la historia de las luchas del pueblo colombiano plasmada en  los monumentos y sus  áreas verdes del Puente de Boyacá.

El ingeniero Gabriel Méndez aseguró que se perderá un contrato por $ 90.000 millones, para la variante y ya se ha negociado el 80% de los predios requeridos”, con esa decisión se demuestran “ignorancia y desconocimiento”.

El historiador, Eduardo Malagón Bravo, dijo que “la actitud del Gobierno no tiene en cuenta el patrimonio histórico que urge conservar. En un documento expresamos por qué se están burlando de la historia de la patria”.

lorenarubianofajardo@gmail.com