La convocatoria extraordinaria del Congreso de la República, comenzando segundo mes de año, abre panorama algo alentador para definir el manual de exigencias de peso, reclamadas por el país, para vivir realidades al término del actual Gobierno.
Es bandeja de oportunidades para el Plan Nacional de Desarrollo, con fortalecimiento financiero del Estado, para revertir inversión privada en industria, comercio y empleo, entre otros, a cuatro años con aporte estatal y privado.
Es la fibra central de la pretendida construcción de país, con motor activo, liderado por el Presidente Duque; no tiene espacios para aplazamientos. La aprobación del PND es ineludible; impone respuesta seria del Congreso.
No puede olvidarse, prelación a lo social, de acuerdo con lo comprometido para financiar las universidades públicas con porciones billonarias, asignadas sobre el papel de compromiso para el cuatrienio.
Se agrega, la necesidad de un mecanismo estable en pago de salarios a profesores de educación pública; Insólito sería que, la tardanza se origine por carencia de recursos. Grave: esa asignación se ha prometido miles de veces.
Quedan volando eventuales ajustes en el sistema laboral, al igual que la discutida Reforma Pensional, proyectada para uno o dos años más, luego de esperas para muchos y, poca credibilidad para otros; Siempre se concluye que los recursos no alcanzan.
Habrá compensación social, con saneamiento para la salud; No pasa inadvertido, que se proyecta facultar por Ley, a la Superintendencia Financiera, para ejercer control económico sobre las EPS.
Vigilará recaudos, manejo de recursos, transacciones en adquisición de medicamentos, abonos a deudas con clínicas y demás instituciones prestadoras de servicios.
Eso significa beneficios para usuarios, servicio médico-asistencial y empleado de la red de salud. Quizá con menos EPS, pero más fuertes y, lejos de desorden y corrupción, la atención pública mejore.
Se anticipa control a los hospitales públicos en ciudades y poblaciones. Según el ministerio de Salud, la dirección de los mismos, estará al margen de partidos políticos, y sin las tradicionales presiones de Concejos y asambleas para nombrar directivos.
El Plan sugiere eliminar sobretasa a energía hotelera y por decreto de Gobierno, plantea reconocer la hotelería como industria.
Hay decisión del Ministerio de Minas y Energía, para impulsar la Energía Renovable, con base en sol y viento, para todo el país; Es la cuarta revolución industrial en el mundo, generando energía en varios países.
Congreso y Gobierno ojalá se concentren en culminar vías principales y terciarias, así como terminación de obras para mejoras en aeropuertos. Son frentes con trabajos a mitad de camino.
Y juega el reto comprometido con EE.UU: erradicar este año cerca de 100 mil hectáreas, con hoja de coca, de 171 mil sembradas. Así el PND, es duro Plan agobiante, requiere presupuesto, diligencia y cumplimiento.