Los últimos años han sido decisivos para la educación en el mundo y por supuesto en Colombia. Tras la pandemia del covid-19 y, los grandes cambios tecnológicos que han ocurrido en la última década, el panorama del mundo empresarial ha replanteado las dinámicas con su fuerza laboral, en relación a la importancia de la capacitación.

De hecho, en medio de este panorama, las compañías se dieron cuenta del provecho que tiene el entrenamiento y la capacitación permanente de sus colaboradores. Entendieron la oportunidad de apostarle a las capacitaciones, no solo para las habilidades técnicas y profesionales sino como una forma de aumentar la productividad y competitividad de los negocios. Y en ese sentido, la formación laboral se convirtió en una pieza clave para el crecimiento de las empresas potenciando el desarrollo humano y las oportunidades de mejora de la fuerza de trabajo.

Tanto así que, de acuerdo con una encuesta de la Andi, hoy en día 8 de cada 10 empresas en Colombia capacitan a sus empleados. Aunque, por otro lado, un informe de la firma Change Américas, reveló que aproximadamente un 90% de los altos ejecutivos y presidentes de las compañías del país enfrenta aún brechas de habilidades, principalmente por la falta de formación de sus empleados, lo que significa, que aún quedan desafíos y oportunidades para las pymes y organizaciones del país.

En este sentido, el contexto económico es más desafiante y se requieren de nuevas habilidades tales como: gestionar la experiencia del trabajador, liderar la transformación digital e innovación y flexibilidad. Un ejemplo  de lo anterior es la aplicación de la inteligencia artificial (IA) en las organizaciones, no sólo para automatizar procesos sino con el fin de aumentar la productividad. No obstante, para este objetivo es importante la capacitación de equipos multidisciplinarios que, además tengan el dominio de escenarios colaborativos, es decir, hoy nos enfrentamos por un lado a los avances tecnológicos y, por el otro al desarrollo humano que deben estar siempre alineados para llegar al éxito empresarial.

De acuerdo, con 14ª edición del informe anual de Deloitte Tech Trends, que explora el impacto de las oportunidades tecnológicas emergentes en diversas áreas de las organizaciones como las de innovación (interacción, información y computación) y las fundamentales para el negocio (tecnología, cyber y seguridad, y modernización central) asegura que las organizaciones que no involucren las nuevas tecnologías quedarán rezagadas. Al mismo tiempo, el metaverso empresarial y el neuroliderzago serán tendencia y pieza clave para los nuevos líderes del futuro.

Entonces surge la pregunta ¿cuáles son los beneficios de las capacitaciones empresariales? Bueno, en primer lugar, capacitar la fuerza laboral juega un papel primordial para el logro de tareas y proyectos, las acciones de formación laboral en cualquiera de sus versiones ya sea en: cursos, talleres, diplomados, programas y conferencias que permiten a los trabajadores adquirir habilidades y conocimientos tanto teóricos como prácticos para desempeñar de manera óptima su cargo, además ayudando a prevenir riesgos en el trabajo, al mismo tiempo, promueve la comunicación en la organización y la sinergia en los equipos, así como transforma la actitud en el entorno desarrollando las llamadas “Soft skills” o habilidades blandas. 

En segundo lugar, cuanto mayor sea el grado la preparación de los trabajadores, mayor será su nivel de productividad. Los programas de capacitación constituyen una de las inversiones más rentables a largo plazo puesto que, una organización que no esté alineada con las nuevas tecnologías, puede, estar condenada al estancamiento y con él, el retroceso impidiendo la competitividad en el mercado, adicionalmente la capacitación empresarial mejora los índices de retención evitando la rotación permanente.

En conclusión, la formación empresarial de la fuerza de trabajo permite no solo el desarrollo individual, traduciéndose en personas más integradas afianzando su sentido de pertenencia con la compañía aumentando la productividad y generando beneficios a largo plazo.

En este contexto, nace el Centro de Consultoría Empresarial de la Universidad de Ibagué para identificar problemas, diagnosticar necesidades y aportar soluciones sostenibles que permitan el impulso del tejido empresarial del país.

@unibagueoficial

* Director del Centro de Consultoría Empresarial de la Universidad de Ibagué